19 Mayo de 2021 16:29
En el marco de las consecuencias laborales de la pandemia, una encuesta de Bridge The Gap, hub de soluciones en género y diversidad, arrojó que 9 de cada 10 personas que redujeron horas de trabajo fueron mujeres con hijos a cargo.
"Sabemos que el Covid19 ha afectado a todas las personas, y también sabemos a esta altura que particularmente afecta más a las mujeres y minorías", señaló al respecto Cintia González Oviedo, Ceo de Bridge The Gap. "En el mundo se habla de retrocesos de 10 años en cuanto a puntos de inserción laboral. Por eso quisimos ver exactamente de qué estamos hablando en Argentina en cuanto a nuevas brechas".
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De las mujeres que tuvieron que abandonar horas laborales, el 46,5% indicó que tuvo que asumir más responsabilidades domésticas, mientras que el 39,5% tomó mayores responsabilidades de cuidado, y el 32.5% dejó de trabajar para acompañar a sus hijos en su escolaridad. Sólo el 25.5% lo hizo por miedo al contagio.
Mientras tanto, en relación a las dificultades laborales en pandemia, el 43,9% de los encuestados indicó como la principal la gran cantidad de reuniones diarias derivadas del teletrabajo. El 36,1% expresó que sus empleadores no les proveyeron de insumos para desempeñar sus tareas y otro 36,1%, indicó que sus superiores no respetaron los horarios de descanso.
Pero en el segmento de las encuestadas mujeres, un 37% apuntó que su principal dificultad al momento de adecuarse a la jornada laboral eran las responsabilidades familiares. En contraste, un 23% de los varones señaló el mismo problema.
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En relación a las políticas empresariales, la encuesta arrojó que 4 de cada 10 empresas que pasaron a teletrabajo no adoptaron ningún tipo de medida puntual o cambio de enfoque laboral a pesar de la digitalización de las reuniones de trabajo y de la interrupción de la presencialidad.
Así, el 40.8% de los encuestados señaló que no se le brindaron herramientas necesarias para trabajar desde casa, mientras que el 24.6% indicó que se tomaron medidas de promoción de la salud mental y, apenas un 13.3% expresó que contaron con medios de atención específica para casos de violencia doméstica.
