Pasaron ya 14 años de la tragedia de Ecos. Luego de una larga batalla judicial, recién ahora la Justicia de Santa Fe condenó al chofer del colectivo en el que viajaban los alumnos y docentes por el delito de "homicidio culposo múltiple", con una pena de tres años de prisión en ejecución condicional (no irá a la cárcel) y cinco años de inhabilitación para conducir vehículos.
El terrible hecho sucedió el 8 de octubre de 2006 en el kilómetro 689 de la Ruta Nacional 11, en jurisdicción de la localidad de Margarita, cuando Oscar Eduardo Atamañuk conducía el micro de la empresa Godoy, en el que iban a bordo estudiantes y docentes del Colegio Ecos de Villa Crespo que volvían de un viaje solidario a la escuelita de El Paraisal, cercana a la localidad de Quitillipi, provincia de Chaco.
Según quedó constatado en la causa, un camión que venía de frente, manejado por un conductor alcoholizado, chocó contra el bus, lo que produjo la muerte de nueve alumnos y una profesora. También perdieron la vida los dos hombres que iban a bordo del camión, quien manejaba, Ángel Soto, y su acompañante, Hugo Fabian Albrecht.
En el accidente fallecieron Julieta Posilovich, Daniela Carla De Agostino, Julieta Giataganellis, Delfina Goldaracena, Julieta Hartman, Nicolás Kohen, Benjamin Bravo De La Sena, Lucas Ezequiel Levin, Federico Ecker y Mariana Boye, mientras que además 38 personas resultaron heridas.
Los familiares de las víctimas tuvieron que esperar 14 años para que se hiciera justicia, ya que durante todo este tiempo hubo enormes fallas en el sistema judicial, lo que provocó que la causa casi prescribiera en 2019.
Tras un primer proceso penal fallido, en 2011 Atamañuk fue condenado a una pena de tres años de prisión en suspenso, pero el fallo fue anulado por la Cámara de Penal de Rafaela luego de que se descubriera que no se le había tomado declaración indagatoria al acusado.
"Hubo mala praxis judicial, se olvidaron de hacer declarar al imputado y por eso pidieron la nulidad del fallo", explicó a este sitio Sergio Kohen, padre de Nicolás, una de las víctimas fatales.
Después de los recursos que interpuso su defensa durante este tiempo, finalmente este miércoles, un día antes de que se cumpliera otro aniversario del accidente, el Tribunal de la Cámara de Apelaciones de Vera, provincia de Santa Fe, presidido por Eduardo Bernacchia, condenó al chofer a una pena de tres años de prisión condicional por “homicidio culposo múltiple”.
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"La verdad es que la Cámara confirmó el fallo de homicidio culposo, pero incrementó la pena. Al categorizarlo como homicidio, por más que sea culposo, queda claro que la corresponsabilidad del que manejaba el micro era de él", sostuvo.En este sentido, explicó que durante todo este tiempo no se trató de lo que los padres de las víctimas querían o no respecto a si el chofer debía ir preso, sino que lo único que buscaron fue hacer justicia por los fallecidos.
Emocionados pero a la misma vez con una fuerte sensación de ambigüedad ante este fallo, los familiares de las personas que murieron decidieron hacer pública una carta en la que indicaron que "la condena en suspenso a cárcel por 3 años, y la inhabilitación para conducir por 5, son sólo un eslabón en la cadena de responsabilidades".
"Si bien la celeridad en tratar la causa de esta última instancia judicial, dista enormemente de la dilatación promedio e insoportable que sufriera nuestro expediente, parecería inverosímil que algo de tan sentido común, como es evitar que, quien fuera corresponsable de la pérdida de vidas por causa de sus propias conductas homicidas, continuara alegremente manejando a gusto y piaccere por las calles y rutas de nuestro país, tardara 14 largos años en concretarse", se lamentaron.
Además, añadieron que ahora deben esperar hasta el 20 de este mes, para ver si el dictamen permanece firme, o si otra vez existe la posibilidad de que sea apelado y entre "en el tobogán de las secuencias pendulares". "Así nos sentimos. Moviendo la ficha un casillero para adelante y aferrándonos para que no nos hagan ir 5 para atrás", añadieron.
Por su parte, Kohen comentó que hoy en día existen muchas organizaciones que trabajan en la prevención de accidentes y que se dedican a la educación vial, y que siempre se dan "pequeños avances y se ven pequeños pasos".Tras el accidente, los papás de los fallecidos decidieron crear una asociación llamada Conduciendo a Conciencia, desde la cual buscan concientizar sobre la solidaridad, el cuidado de la vida y la seguridad vial en la Argentina. Luis Alberto Spinetta fue uno de los principales impulsores de la asociación. En el micro viajaba una amiga de su hija Vera.
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Por eso, para recordar y homenajear a las víctimas, en el Día Nacional del Estudiante Solidario, durante la noche de este jueves se llevará a cabo un recital solidario por streaming, del cual participarán varios reconocidos artistas, ya que todo lo recaudado será destinado a la compra alimentos no perecederos y útiles escolares que llegarán a 18 escuelas rurales que integran 1800 alumnos y sus familias, y a 3 salitas de primeros auxilios en 5 provincias del norte de nuestro país."Siempre se hacen pequeños avances, pero con el aumento del consumo de alcohol, el manejo de la infraestructura, la falta de controles y la negligencia de quienes conducen, parece que todo lo que se hace es insignificante", cerró Kohen.