Desde la llegada de Cambiemos al Gobierno, el objetivo de paliar el déficit de viviendas fue prioritario. En esa línea se restablecieron los créditos hipotecarios y hoy avanzan un paso más, ya que se construirán 100.000 viviendas en un año, en todo el país.
En la Argentina más de 3 millones de familias no tienen una vivienda digna.
Este nuevo proyecto que se lanzará el lunes a la mañana está sustentado en un compromiso entre el Gobierno, los bancos, los gremios relacionados a la industria de la construcción y la Cámara de la Construcción Argentina (CAC) propiamente dicha.
Las conversaciones que dieron origen a este "gran plan de viviendas" comenzaron hace tres meses. La mesa que impulsó el proyecto, estuvo integrada desde el momento cero por el ministro del Interior, Obras Públicas y Vivienda, Rogelio Frigerio, el ministro de trabajo Jorge Triaca, el titular del Banco Central, Federico Sturzenegger,el titular de la cartera de Transporte- y que tiene a su cargo toda la obra vial, Guillermo Dietrich, el presidente de la CAC, Juan Chediak y el Secretario General en la Unión Obrera de la Construcción, Gerardo Martinez.
Rogelio Frigerio fue uno de los principales impulsores del proyecto.
Esta conjunción de referentes de diversos sectores se propició en pos de un trabajo conjunto, en el que cada uno se comprometió a hacer su aporte. Así desde el gremio de la construcción, Martínez trabajará para mejorar la capacitación y el presentismo de sus afiliados.
Desde la construcción se capacitará a sus afiliados y se promoverá el presentismo.
Por su parte, desde las entidades nucleadas en la Asociación de Bancos de la Argentina (ABA) prometieron una baja de los Ingresos Brutos de los gobiernos provinciales. A este compromiso ya adhirieron la ciudad y la provincia de Buenos Aires. Ambos conglomerados representan algo así como el 60% del mercado de viviendas. A su vez, se espera también una baja de las tasas de interés.
El acuerdo también se complementará con el otorgamiento de créditos hipotecarios para que las familias puedan acceder a una vivienda propia. En lo que respecta a la CAC, desde ese sector acordaron propiciar una baja de los costos de la construcción.
El Central prometió una baja de ingresos brutos a las provincias que suscriban el acuerdo.
Pero una de las implicancias fundamentales para este proyecto es “un decreto de transparencia”, interpuesto para que todo el proceso de estas obras, que entran dentro de la órbita pública pueda ser consultadas y revisadas de manera online, que sean de libre acceso, genere la competencia entre empresas y además elimine trabas burocráticas
En su compromiso el Gobierno había previsto 120.000 viviendas en cuatro años, pero con la implementación de este nuevo plan mejorará considerablemente su performance y posibilitará que más de 3 millones de familias puedan tener su casa.