Dulce, tentador y sumamente delicioso, el chocolate es el más fiel acompañante en los momentos clave de la vida, y es capaz de levantar el ánimo en los días más grises, sacar del paso a una persona olvidadiza en algún aniversario y también puede hacer aún más especial la llegada de un nuevo amor.
La "barrita Kinder" es el foco de las críticas.
Sin embargo, Foodwatch, una asociación sin fines de lucro, publicó un informe en el que detalla que los chocolates de Ferrero, Lindt y Rübezahl contienen minerales peligrosos, y, principalmente, sustancias potencialmente cancerígenas en sus envoltorios.
Fioretto Nougat Minis de Lindt, otro de los productos denunciados por la ONG.
La ONG alemana que se dedica a la seguridad alimentaria encendió las alarmas en todo el mundo. Luego de analizar más de 20 productos, el organismo determinó que en los envoltorios de tres había hidrocarburos aromáticos derivados de aceites minerales (MOAH), un subproducto que se obtiene de la refinación del petróleo y que sería cancerígeno.
En detalle, encontró la presencia de MOAH en los envoltorios de las famosas "barritas Kinder" de la empresa Ferrero, los Fioretto Nougat Minis de Lindt y Sun Rice Classic Schoko Happen de la marca Rübezahl.
Sun Rice Classic Schoko Happen , el tercer producto cuestionado.
Desde Foodwatch aseguraron haber informado ya a las empresas de los resultados para que retiren sus productos de la venta al público, para evitar cualquier tipo de problemas o inconvenientes. No recibió el visto bueno de ninguna de las compañías.
La autoridad sanitaria argentina Anmat señaló que "se están haciendo los estudios y evaluaciones técnicas correspondientes" para conocer si existe riesgo en el país.
La respuesta de “Kinder”
La sucursal de Ferrero Argentina, la firma encargada de elaborar el famoso Kinder en el país, emitió esta tarde un comunicado en el que asegura que todos sus productos y “en especial Kinder Chocolate, son seguros y fabricados con la máxima calidad y atención a la seguridad, siempre de acuerdo con las más estrictas legislaciones y regulaciones alimentarias”.
Ferrero, el hogar del famoso Kinder.
“En Ferrero, estamos trabajando junto con nuestros socios de la cadena de suministros buscando soluciones técnicas para minimizar al máximo nivel posible estas substancias omnipresentes y también para evitar la transferencia de dicha substancia a través de los envoltorios de los alimentos”, señalaron desde la empresa.
Foodwatch y su enojo con la Industria Alimentaria
La ONG está conformada por Alemania, Francia y Holanda, y aseguró en su informe que las empresas estaban informadas sobre las probabilidades de que sus productos sean cancerígenos.
"En vez de quitar los chocolates del mercado y advertir a los consumidores sobre el riesgo, en Ferrero sostienen que todo se ha hecho de forma legal", explicó John Heeg de Foodwatch.
La barrita Kinder fue el producto con peores resultados.
A su vez, el organismo denunciante criticó a la Federación de la Industria Alimentaria, la asociación a la que pertenecen las tres marcas de chocolate denunciadas, por su defensa para con los productos.
Según la organización alimentaria se han hecho "iniciativas de investigación y las medidas de gestión de la calidad" supuestamente exitosas para reducir las sustancias peligrosas en los alimentos y expresaron que el consumo de chocolate es “inofensivo”.
Sin embargo, la Agencia Europea para la Autoridad de Seguridad Alimentaria (AESA) aseveró que los hidrocarburos aromáticos actúan en los alimentos mutagénicos, independientemente de la cantidad que se ingiera.
Ferrero aseguró que su producto es inofensivo.
Las "barritas Kinder", una de las golosinas más vendidas en todo el mundo, fue el producto con peores resultados obteniendo los niveles más altos en los valores de aceites minerales saturados (MOSH), así como en los de los aceites minerales aromáticos (MOAH).