Como sucedió con el juego "Charly-Charly", los jóvenes tienen un peligroso entretenimiento. Se conocieron diferentes casos de adolescentes de colegios secundarios que asisten a cementerios para realizar rituales frente a lápidas.
Se lo conoce como el "juego de las tumbas" y alerta a los padres. Puede provocar trastornos físicos, psicológicos y emocionales. Se trata de nueva versión de la Ouija, que promete a los jóvenes entablar contacto con el "más allá" mediante la repetición de un texto de presuntos "orígenes satánicos".
El juego provoca serios trastornos psicológicos.
El año pasado, los jóvenes invocaban espíritus mediante las reglas del "Charly-Charly". La propagación del juego mediante la difusión en Facebook y muchos de los que lo practicaron sufrieron ataques de pánico y convulsiones.
"Charly-Charly" fue una reversión de la Ouija.
El nuevo juego tiene el mismo fin: llamar a los "del más allá" y según se conoció, los jóvenes afectados tiene entre 13 y17 años, y padecieron convulsiones, pesadillas, ataques de pánico y la necesidad de exorcismos. Al respecto, el sacerdote Manuel Acuña, sostuvo "la difusión de este juego está relacionada a personas que practican el satanismo, utilizando para su difusión y propagación las redes sociales, sobre todo Facebook, logrando captar a chicos de colegios secundarios".
Los cementerios son recorridos por los jóvenes y buscan tumbas de niños.
El religioso indicó que días pasados tuvo que intervenir en un caso donde seis jóvenes que habían practicado el juego en marzo, padecían secuelas.
"Tuvieron consecuencias oscuras, espirituales y psicológicas. Tuvimos que hacer un exorcismo grupal. Es qeu el supuesto juego las obligaba a concurrir al cementerio, detenerse frete a la lápida de una criatura fallecida de hasta tres años y hacer una invocación con un texto que les habían suministrado en el grupo de Facebook", explica y sigue. "En ese mismo momento, tuvieron consecuencias físicas. Se asustaron, quemaron el texto, pero el horror siguió varios meses. Sus familias probaron de todo, hasta que finalmente realizamos exorcismo", dijo Acuña a Diario Popular.
El peligro del juego es que seduce a los adolescentes al ser difundido en Facebook.
Asimismo, el sacerdote remarcó que lo que parece "algo inocente" termina convirtiéndose en "algo grave". "Este juego es como un segundo nivel en la escala del satanismo", afirmó y aseguró que en los grupos cerrados de Facebook seducen a jugadores de entre 13 y 17 años.
"Estamos recibiendo consultas de familias de todo el país (...) Es necesario que la población esté advertida, que conozca lo que sus hijos pueden estar consumiendo en las redes sociales. Son muy hábiles los adultos que están detrás de esto", finalizó.