14 Enero de 2019 13:44
La aparición de un tiburón en las playas de Santa Clara del Mar, al sur de Mar del Plata, en la mañana del domingo último generó sorpresa y alarma entre los turistas. Pero los conocedores de la zona, pescadores sobretodo, aclararon que se trata de una variedad del escualo que es inofensiva.
Quien dio a conocer la novedad fue Eduardo Francisco Cañueto, un reconocido pescador deportivo de la zona, quien publicó un video en su cuenta de facebook.
En el video se ve la aleta del tiburón, en un mar muy tranquilo, muy cerca de la orilla, a pocos metros de la playa, mientras se observan varios pescadores en los espigones.
Mientras el tiburón se acerca hasta la orilla, en el fondo se ven algunos deportistas. Aparece un hombre con un kayak y otra con una tabla de surf, que no parecen preocupados por esa inquieta presencia.
El mismo Cañueto sostuvo en su misma cuenta de facebook que la variedad de tiburón que hay en la zona de Mar del Plata, el bacota, es inofensivo y no ataca a los humanos.
De todos modos, aunque la presencia de tiburones en las playas argentinas no son tan comunes, tampoco es extraño que se registren videos cuando aparecen.
El único ataque registrado
Y si bien es cierto que no hay datos de ataques de tiburones a turistas o deportistas en nuestras costas en los últimos años, los más veteranos residentes de Mar del Plata recuerdan un hecho que ocurrió a mediados de la década del 50, el siglo pasado.
Los diarios de la época dieron cuenta del ataque sufrido por Alfredo Aubone, el 22 de enero de 1954, cuando se metió en el mar acompañado por dos amigos.
Aubone era un experto nadador y cuando estaba a unos 70 metros de la costa, a unos dos metros de profundidad, fue atacado por un tiburón que lo mordió en las piernas y en los brazos.
El tiburón lo llevó varias veces hasta el fondo del mar y el joven nadador sintió como el tiburón le desgarraba los músculos. Pese a todos pudo llegar hasta la orilla cubierto de sangre, con la ayuda de Angel Fulco, el guardavidas del balneario Gallina.
Según un crónica de Mariano Magnussen Safer, Aubone fue atacado por un tiburón tigre blanco, una especie que no se encuentra en nuestras playas, ya que su habitat es el Atlántico Norte.
"Algún tiempo después, cuando Alfredo Aubone llego al hospital de Stanford, en Los Ángeles, para terminar sus largas curaciones, llevó un diente que había sido retirado de su pierna, fue entregado a Walter Follet, director de la Academia de Ciencias del Estado de California, lo examino y dio su veredicto", escribió.
"La conclusión fue que se trataba del comúnmente llamado “Tiburón Tigre Blanco”, su longitud estimada era de cinco metros y una edad de 6 años. Si bien solo hay unos pocos registros de esta especie en las costas de Argentina, se supo que una semana antes del ataque, un barco portaaviones norteamericano arribo al puerto de Mar del Plata y posiblemente el tiburón siguió la estela de agua cálida que deja el buque, y además se aseguraba su alimento del desperdicio del barco", agregó.
