La embajada de China en la Argentina ratificó ayer que se lograron "acuerdos" con el Gobierno nacional para la producción en el país de su vacuna contra el coronavirus, creada por el laboratorio Sinopharm.
"Tras la reunión con Carla Vizzotti (ministra de Salud), el Embajador Zou Xiaoli afirmó que se alcanzaron acuerdos para la producción de las vacunas de Sinopharm (el grupo farmacéutico chino) en Argentina. Las farmacéuticas de ambos países realizarán inmediatamente las consultas para arrancar la producción lo antes posible", sostuvo la embajada en Twitter.
"La Embajada de China en la Argentina, como siempre, apoyará el esfuerzo conjunto de ambos países para enfrentar la pandemia y asistirá a Sinopharm en su estrecha colaboración con el país, a fin de elevar la respuesta China-Argentina ante la emergencia sanitaria", dijo el representante diplomático.
También participaron del encuentro el embajador argentino en China, Sabino Vaca Narvaja; directivos de Sinopharm, en China y Argentina, y representantes de Sinergium Biotech.
Vizzotti destacó en esa ocasión "la buena voluntad" de ambos gobiernos y de los socios del sector privado, así como la "relevancia estratégica" que significa para el país "la posibilidad de colaborar y ser parte de la investigación y la cadena de producción de vacunas que se utilicen en Argentina y en Latinoamérica en el mediano y largo plazo".
La ministra resaltó el inicio de un cronograma de trabajo conjunto con intercambio de información, procesos de adecuación de insumos y equipos y el control de calidad.
Vizzotti agradeció además al embajador el envío de los últimos dos millones de dosis "para poder completar esquemas iniciados", y la importancia de seguir contando con vacunas del país asiático mientras se trabaja para la producción local.
Uno de los socios de los laboratorios que producirán la vacuna en la Argentina es un empresario conocido en el último tiempo. Su nombre es Hugo Sigman, y tuvo a su cargo la pata local de la fabricación de la vacuna de AstraZeneca que todavía no llegó al país y cuyo contrato se encuentra judicializado debido a que faltan dos meses para que se termine de incumplir y no hay noticias de envíos de dosis.