La jueza federal de San Isidro, Sandra Arroyo Salgado, querellante en la causa por la muerte de su ex pareja, Alberto Nisman, pidió un nuevo peritaje sobre el arma para determinar si, al dispararla, deja rastros de pólvora.
El planteo fue hecho en las últimas horas ante la fiscal Viviana Fein, quien investiga la muerte de Nisman, y en dos oportunidades rehusó realizar ese peritaje.
El arma fue sometida en dos oportunidades a una prueba denominada "barrido electrónico", en laboratorios de la Justicia bonaerense y de la Gendarmería Nacional en Salta. En ambos casos, no se detectaron rastros de pólvora. Tampoco los había en las manos del fiscal.
La nueva pericia se realizaría en Salta.
Desde el inicio de la causa, la jueza Fabiana Palmaghini le sugirió a Fein otro peritaje: volver a disparar el arma y comprobar, recreando las condiciones de la jornada en que murió Nisman, si deja rastros de la deflagración en las manos de otra persona. Palmaghini insistió en esa cuestión y ahora la querellante Arroyo Salgado coincidió en la necesidad de llevarla a cabo. Ahora Fein inició los trámites para hacer la pericia que se realizaría en el laboratorio de Gendarmería en Salta.