13 Octubre de 2017 14:30
La limpieza y el cuidado de la salud se convirtieron hoy en día en uno de los temas mas hablados. Incluso, muchos llegan a obsesionarse con el aseo, y en ciertos momentos, hasta convierten sus cuidados en una manía.
Sin embargo, parece que el lavado no está para nada demás, ya que un reciente estudio demostró que el teclado de una computadora o el de un celular pueden tener más bacterias que un inodoro.
Un estudio reveló que en el teclado de la PC hay más bacterias que en el inodoro.
La investigación fue llevada a cabo por investigadores de la carrera de Ingeniería en Alimentos de la Fundación UADE, quienes hicieron el análisis para difundir sus resultados el próximo 15 de octubre, fecha que es reconocida mundialmente como el Día del Lavado de Manos.
Según demostró el estudio, en el teclado de una computadora o en el de un celular se pueden observar niveles de suciedad biológica mayores que los que hay en el interior de un inodoro.
El análisis también arrojo que el botón del inodoro y el piso del baño son lugares muy contaminados.
En relación a esto, y gracias un análisis microbiológico, también se determinó que la gran mayoría de los contaminantes son bacterias aerobias mesófilas, las cuales se encuentran normalmente en el ambiente.
Lo cierto, es que las muestras se tomaron de 35 baños del conurbano bonaerense, y los resultados, además de determinar que los niveles de contaminación más elevados se encuentran en el teclado y el celular, también precisaron que el botón del inodoro, el piso del baño y el bidet son los principales lugares donde se produce la contaminación.
El estudio sostuvo que lo más importante para combatir la suciedad es el lavado de manos.
Por último, el análisis arrojó como resultado final, que en una muestra realizada en 30 manos, los niveles de suciedad en algunos casos fueron más elevados que los observados en una escobilla de baño, por lo que, destacar la importancia de la limpieza regular de manos es sumamente necesario para prevenir enfermedades y cuidar la salud.
