La causa que investiga la muerte de Natacha Jaitt -ocurrida el último sábado a la madrugada en el Complejo Xanadú, situado en la calle Isla Verde 644, en el barrio La Ñata, partido de Tigre- y que quedó a cargo de los fiscales Sebastián Fitipaldi y Diego Calegari, está, por ahora, sobre terreno incierto.
Mientras el juez Martín Yadarola, titular del Juzgado Nº4 y que tiene en sus manos la denuncia por abuso sexual que Natacha realizó contra el cineasta Pablo Yotich y su amigo Maximiliano Giusto, busca encontrar una conexión entre la causa por violación y la que investiga su muerte, los investigadores terminaron de analizar las 12 cámaras de seguridad del complejo.
Luego de que declararan aquellas personas que estuvieron y que fueron circunstancialmente al lugar -testificó el chico del delivery que llevó el sushi para la cena: la justicia indagó si realmente se hizo el pedido de la comida, qué tipo de mercadería llevó o a qué horario llegó y se fue- y determinó cómo fueron los últimos minutos de Natacha a través de las cámaras del lugar.
Guillermo Rigoni, el dueño del complejo Xanadú.
Hasta el momento se pudo comprobar que la situación se desarrolló en el primer piso del complejo Xanadú, en una habitación que tenía un baño. A la 1.04 de la madrugada, una de las cámaras registró como Natacha y Guillermo Rigoni, el dueño del local, entraron a la habitación.
Rigoni había dicho en su declaración que Natacha fue al baño en dos oportunidades, que ella le habló del consumo de una droga (cocaína) y que él salió de la habitación a buscar una botella de champagne.
A su vez, señaló que ella estaba desnuda, en la cama, que habían intentado tener sexo y que aparentemente ella se había quedado dormida. "Yo me acerqué a ella, me acosté a su lado y, sin mediar palabra, le toqué un poco la vagina....”, relató el empresario.
Y sumó: “Le pedí si me la chupaba un ratito, pero ella no me contestó, se quedó quieta, con la boca abajo con la cara hacia un costado, así que pensé que se había dormido, por lo que me retiré despacito".
Las cámaras de seguridad -según detallaron en TN- comprobaron que Natacha y Rigoni estuvieron en la habitación desde la 1.04 hasta la 1.26, es decir, 22 minutos. Cuando el empresario se retira, se observa que ella estuvo 14 minutos sola en la habitación.
Cuando salió Rigoni, la puerta queda entreabierta y desde el pasillo que conduce a la habitación se pueden ver algunos movimientos. Según fuentes de la causa, se observa una persona agarrar una bata, agacharse, correrse y pasar de largo.
Los investigadores suponen que se trata de la propia Natacha. Sin embargo, se está tratando de mejorar digitalmente la calidad de la imagen para verificar si la ex modelo es realmente la protagonista de esa secuencia dentro de la habitación.
Durante su testimonio, Raúl Velaztiqui Duarte -representante y amigo de Natacha, detenido por falso testimonio- y Rigoni sostuvieron que la llamaron y le mandaron celulares a su teléfono, y advirtieron que no recibieron respuesta de parte de la mediática.
Fue entonces que decidieron subir a la habitación -primero el representante y después el dueño del local- a la 1.40, después de los 14 minutos que Natacha estuvo sola. Dentro de la habitación ambos estuvieron nueve minutos más, entre la 1.40 y la 1.49.
Raúl Duarte Velaztiqui, el primer detenido.
En el 911 del Ministerio de Seguridad de la provincia de Buenos Aires están grabados dos llamados de emergencia: el primero, del dueño del lugar; el segundo, de Velaztiqui Duarte. El productor de espectáculos que llevó a Natacha al salón Xanadú fue detenido por falso testimonio a raíz de las contradicciones en sus dos declaraciones originales como testigo.
A Velaztiqui Duarte se le reprochó que se quedara con el celular de Jaitt, que el fiscal Sebastián Fitipaldi encontró oculto en su camioneta Fiat Adventure en la inspección del Xanadú luego de la llamada al 911. Allegados al representante señalaron que faltó a la verdad "por miedo" y que se llevó el celular para preservarlo.
Las imágenes del salón y el vínculo entre el detenido y uno de los denunciados por violación
En la causa ya declararon todas las personas que estuvieron aquella noche. Además, están secuestrados todos los celulares de los involucrados y de la propia Natacha, más una Tablet, a la espera de que se realice la pericia tecnológica. Se están analizando todos los mensajes de texto, de WhatsApp, navegación por internet, llamadas, y casillas de mail que demoran el peritaje.