17 Abril de 2017 08:01
Lo reconocieron por sus ojos. El paso de los años no cambió la mirada de Pablo Cuchán. Fue protagonista de uno de los crímenes más brutales de Bahía Blanca. Ahora lo encontraron buscando pareja en Tinder.
Cuchán cumplió parte de una condena por matar, descuartizar y quemar a su novia.
Cuchán fue condenado en 2007 a 17 años de prisión por haber asesinado, descuartizado e incinerado en una parrilla a su novia de 15 años, Luciana Moretti. Sin embargo, como nunca obtuvo sentencia firme, lo liberaron al cumplir 11 años preso. Ahora, fuera de la cárcel, "Cuchi", como se hace llamar, busca pareja en Tinder.
La cuenta de Cuchán en Tinder.
La captura de la supuesta cuenta de Cuchán en la red social empezó a circular pocos días después de que se lo involucrara en un nuevo episodio de violencia de género.
El acusado del femicidio recibió el alta por parte de las psicólogas a cargo de su tratamiento en la localidad de Monte Hermoso, a donde se fue a vivir al salir de la cárcel.
En el informe los profesionales afirman que "no hay criterios para la continuidad del tratamiento psicológico" y que la conducta de Cuchán condice con "la adaptación que logró en su nueva vida".
Pero se conoció que su última pareja, una empleada municipal, denunció en el sitio Brújula24 haber sido víctima de sus agresiones.
El acusado del crimen de Moretti tiene un perfil en Facebook.
La mujer contó que Cuchán se había separado hacía poco tiempo, le cruzó el auto en la calle arrancándole uno de los espejos retrovisores y a los gritos le pedía que lo perdonara y volviera con él. Asustada, ella se fue directo a la comisaría.
El crimen de Luciana
Pablo Cuchán tenía 25 años cuando según declaró no supo qué hacer. El condenado se refería a su decisión de quemar en una parrilla de su casa en Ingeniero White el cuerpo de su novia, Luciana Moretti. La joven tenía 15 años. El hecho ocurrió el 16 de octubre de 2004.
La imagen de la joven asesinada.
Según su declaración, realizada en el juicio iniciado tres años después sostuvo que la joven había muerto de sobredosis de cocaína. Además se justificó al asegurar que "se asustó". Cuchán creyó que la joven estaba muerta y decidió llevarla hasta el quincho. Luego, la acostó en la parrilla y la prendió fuego con 20 libros de solvente y 10 bolsas de leña.
"En la cabeza estaba mi vida entera, 2 millones de preguntas y 2 millones de respuestas que en ese momento no tenía para dar", sumó a la declaración. Más tarde sostuvo que abrió el fogón y empezó a sacar lo que había. "Junté todo, lo puse en bolsas y después lo tiré. Limpié el fogón y ordené todo", completó.