El servicio de transporte privado Cabify desembarca en la Argentina y se suma a la contienda de Uber y los taxistas por quedarse con los pasajeros locales. Su as bajo la manga no es ni más ni menos que la legalidad de su prestación, ya que la empresa de origen español se abre paso una vez que fueron cumplidas todas las normativas municipales que legalizan su funcionamiento.
La aplicación que puede descargarse desde cualquier smartphone tiene fecha de llegada a suelo porteño para mayo próximo, cuando se constituya legalmente, al igual que lo hace en cada país donde opera. De ahí en más será otro el capítulo que se escribirá en la disputa con los taxistas porteños. Creada en 2011, al igual que Uber, la empresa posibilita solicitar un automóvil privado como alternativa a otros medios de transporte.
La aplicación está disponible para cualquier smartphone.
Dentro de otras facilidades que le juegan a favor, a la inminente llegada de Cabify, se encuentra la posibilidad de realizar reservas y la inclusión de un seguro de responsabilidad civil para sus usuarios. Por distintivos como estos, en países como España Uber tuvo que retirarse ante el avance de este nuevo servicio.
Otra de las variantes son sus tarifas, que a diferencia de las de Uber se calcula según la distancia recorrida, mientras que la aplicación norteamericana combina tiempo y distancia. Por el momento no se dio a conocer el precio base con el que iniciarán su servicio en la Argentina.
Ricardo Weder, CEO de Cabify Latinoamérica, explica que el servicio de Cabify se enfoca en la competencia, donde su sistema de precios es un diferencial. Además ofrecen la posibilidad de personalizar el servicio según los viajes que realice cada usuario. Y también adaptarlo a las empresas, cuyo servicio ofrecido le permite reducir sus costos entre un 30 y 40 por ciento.
Ricardo Weder, CEO de Cabify Latinoamérica prepara el desembarco en la Argentina.
Cabify actualmente está presente en España, Perú, Chile, México, Colombia y un amplio plan para expandirse por Latinoamérica. Para ello ya se encuentra en negociaciones con las autoridades de Buenos Aires, Rosario y Córdoba.
"Queremos convivir en armonía con otro tipo de transportes", remarca Weder quien hace hincapié una vez más en la operatoria legal bajo la cual la aplicación desembarca en cualquier ciudad.