Cristina Fernández de Kirchner tuvo este martes la oportunidad de volver a hablar en la previa de que el Tribunal que juzga la causa Vialidad decidiera la fecha y hora en la que brindará el veredicto. La ex presidenta decidió aprovechar su turno para exponer sobre cuestiones técnicas de la causa, los alegatos de la fiscalía o los planteos de nulidad, que es lo que le permitía el reglamento. Eso significaba que, al usar esta chance, no podía hacer un discurso del tipo político.
Los jueces Jorge Gorini, Andrés Basso y Rodrigo Giménez Uriburu, tendrán que dar su veredicto más allá de las coincidencias o discrepancias políticas con la Vicepresidenta, y sobre la base de las pruebas reales presentadas en el marco de lo permitido por los procesos judiciales. Va a haber muchos ojos y mucha presión, tanto de la popular como la de los poderosos, puestos en su decisión.
El Tribunal Oral Federal 2 dará a conocer el próximo 6 de diciembre el veredicto en el juicio por supuestos delitos con la obra pública en Santa Cruz que se sigue a 13 acusados. Las defensas de todos los imputados reclamaron que sean absueltos por inexistencia de delito. Para la Vicepresidenta, los fiscales pidieron 12 años de cárcel por considerarla supuesta jefa de "asociación ilícita" y administración fraudulenta.
La misma condena se pidió para Báez como presunto autor de asociación ilícita agravada por su calidad de organizador y partícipe primario de administración fraudulenta agravada. Además, solicitaron diez años de cárcel para el exministro de Planificación Julio De Vido y para el ex titular de la Dirección Nacional de Vialidad Nelson Periotti, y seis años para el ex responsable del distrito 23 de ese organismo Mauricio Collareda.
La misma cantidad de años, o sea seis, pidieron para el ex titular de la Administración General de Vialidad en esa provincia Juan Carlos Villafañe. Para otro ex responsable del distrito 23 de Vialidad Raúl Daruich y el ex presidente de la AGVP Raúl Pavesi requirió cinco años, y cuatro años para el ex subsecretario de Obras Públicas Abel Fatala, junto a otro expresidente de la AGVP Raúl Santibáñez. En cuanto al ex secretario de Coordinación de Obra Pública Carlos Kirchner, los dos fiscales postularon la absolución por asociación ilícita y una condena a dos años en suspenso por abuso de poder.
Las frases más importantes de CFK
La verdad es que cuando el Dr. Beraldi me habló de este tramo del juicio, al que denominan última palabras, dije bueno últimas palabras, nunca un término judicial tan apropiado para definir lo que es este juicio y este Tribunal. Si el día 2 de diciembre de 2019, cuando me tocó hablar por primera vez ante este Tribunal y dije que era el Tribunal del Lwfare, luego de todo lo que nos ha tocado vivir y en particular lo que me ha tocado vivir, creo que fui generosa. Este Tribunal es un pelotón de fusilamiento. Se inició fundamentalmente a partir de la increíble diatriba a los 20 días que los fiscales Luciani y Mola se dedicaron a injuriar, agraviar, denostar y actuar no conforme a derecho sino cual editorial de Clarín o diario La Nación. Deberían ser los periodistas estrellas de estos medios porque fue increíble el desapego, no solo a las formas, sino al fondo de la cuestión, a los hechos. Durante 20 días ocultaron hechos, inventaron otros hechos, tergiversaron y mintieron y finalmente un 1° de septiembre, una persona acompañado por una mujer dispara o intenta disparar, dispara mejor dicho, intentó matarme pero el tiro no salió. La mujer que lo acompañaba creo que los seguía en Facebook o en Twitter al fiscal Luciani. Curiosa coincidencia. Doce días después, Clarín en su edición nos regala esta tapa: "La bala que no salió y el fallo que sí saldrá". Miren si no hay una identificación con un fusilamiento y esta causa. Durante esos 20 días se contaron hechos que no habían existido, desde reuniones inexistentes y se ocultaron otros. Luego se demostró que cada una de las cosas que habían sido acusación del fiscal eran mentiras. Hasta por Google le habían demostrado que lo que decía por determinado hecho no era cierto. ¡Así estamos! Cuando yo estoy acusada en los Tribunales de Comodoro Py, las figuras de la Asociación ilícita y las presiones preventiva surgen a gusto y piacere, todas orientadas a nuestro espacio político y a quien les habla. Cuando me ha tocado ir como víctima a Comdoro Py, sus colegas establecen que no son asociaciones ilícitas, por ejemplo, de la gente que se comunicaban por redes y cometían actos de violencia contra el Estado, en la Casa Rosada o en mi casa con bombas molotov, y que además eran financiadas por empresarios muy conocidos en esta causa, conocidos porque los descubrimos nosotros cuando miramos el teléfono del señor López. Centenares de chat que revelaban que el trato amistoso, que las determinaciones de obras, que las licitaciones las discutía con algunos empresarios que no eran peronistas sino macristas. es más, vivía en la casa de uno de ellos, aportante también de Cambiemos. Cuando uno es víctima, la figura de la asociación ilícita no existe. Tal vez, porque en Comodoro Py no se considera que mi muerte o asesinato pueda llegar a hacer un acto de conmoción pública. ¿En serio creen que nuestros gobiernos cometieron un fraude en perjuicio de la administración pública? Mi gobierno que entregó un país desendeudado. El Dr. Néstor Kirchner que le pagó al Fondo Monetario Internacional. ¿Nosotros estafamos y defraudamos al país cuando las condiciones de vida de la gente eran muy superiores a las de hoy? ¿Esta es una defraudación al Estado? Sin embargo, quienes trajeron el FMI y 45 mil millones de dólares que no sabemos dónde están, esos no tienen ningún problema. Están en Qatar mirando el Mundial. Los fiscales Luciani y Mola no pudieron responder a ninguno de los hechos, ni replicar ni desmentir a ninguno de los hechos que la querella y también yo, leyendo la Constitución....entonces creo que esta suerte de pelotón de fusilamiento tiene y tuvo por objeto estigmatizar a un espacio político y fundamentalmente a quien tiene el mayor grado de representación de ese espacio, no porque se me ocurra a mi sino porque fundamentalmente las elecciones me dieron ese lugar. La sentencia estaba escrita, lo que nunca pensé que iba a estar tan mal escrito, tan mal acusada como fue en la fiscalía. Fueron tres años en los cuales nada de lo que dijeron pudieron probarlo. Y no solamente eso, sino que cuando hicieron nuevamente la acusación del fiscal fueron todos y cada uno de los hechos absolutamente demostrados que eran falsos y que no habían existido siquiera. No tengo dudas que esta causa va a ser estudiada en el futuro como un ejemplo absoluto de cómo funcionaban las instituciones de la República Argentina en este período tan nefasto donde los juzgados han dejado de ser juzgados para convertirse en partidos políticos de un sector claramente. Por ejemplo, cuando intentaron matarme en la puerta de mi casa, la misma casa donde salí con Néstor para ir a Olivos. Y cuando terminamos volví al mismo lugar. Siempre viví en la misma casa y en el mismo lugar. Capaz algunas otras dirigentes muy importantes de la oposición, vecina del barrio, en un lugar más selecto, compró un departamento a mitad de precio, que además se lo vendió la hija de su contador, que además se lo había comprado un año antes y que además se lo vendió prestándole la plata. Pero el ladrón y la chorra soy yo. Esto es lo que se está viviendo en la República Argentina. La parte mediática ha sido siempre absolutamente imprescindible en este tipo de manejos y en este tipo de causas.