El ministro de Educación nacional, Nicolás Trotta, volvió a referirse al reinicio de las clases y señaló que aunque el gobierno busca generar un consenso entre las provincias, cada gobernador tomará la decisión final para decidir la modalidad de dictado más conveniente.
"Hay pautas nacionales para la vuelta a clases, pero las decisiones de cada regreso las tienen las diferentes jurisdicciones", expresó en diálogo con La Nación.
La idea surge del hecho de que durante el año pasado se suspendieron las clases en todo el país a pesar de que muchas regiones no presentaban circulación comunitaria de coronavirus. Eso se sumó a la falta de recursos de muchos estudiantes para garantizar el acceso a la enseñanza virtual.
"Para nosotros es importante entender que muchas de las decisiones de 2020 son parte de la evidencia del marco de la pandemia e implican un aprendizaje", señaló Trotta al respecto.
Así, para evitar el cierre de escuelas en lugares donde el riesgo de contagio de coronavirus es nulo o bajo, el ministerio adaptará la modalidad a la situación puntual de cada provincia.
"Si tenemos realidades diferentes, tenemos que dar respuestas distintas", ilustró el ministro. "A la diversidad de realidades le respondemos con abordajes distintos. En aquellos lugares donde la realidad epidemiológica sea óptima vamos a intensificar la presencialidad".
Más allá de eso, Trotta advirtió que siempre se buscará construir consensos en las 24 jurisdicciones para maximizar la presencialidad a partir de distintos esquemas.
Es por eso que el funcionario está recorriendo diferentes provincias buscando la manera de promover el regreso a clases más seguro posible y dialogar con dirigentes locales.
El posible frente de conflicto se plantea con algunos gremios docentes, que se niegan a empezar las clases si no están dadas las condiciones sanitarias o lo supeditaron a la vacunación de los trabajadores.
"La vacunación para los docentes comenzará en febrero, pero no vamos a lograr vacunar a todos antes del inicio de las clases", describió Trotta al respecto. "El proceso no terminará rápidamente".
En CABA
El ministro de Salud porteño, Fernán Quirós, ratificó que las clases presenciales en la ciudad de Buenos Aires comenzará el próximo 17 de febrero.
"El daño en los niños por no tener presencialidad es muy alto" aseguró señalando que "la contagiosidad de los niños a los adultos es bien inferior a la contagiosidad promedio de esta enfermedad".
"Estamos trabajando para otorgar seguridad y así iniciar las clases con la mayor presencialidad posible", aseguró aunque advirtió que "en esta enfermedad es muy difícil predecir de acá a muchas semanas por delante".