Luego de que el viernes por la noche, Matías Morales -un joven empleado de 19 años- cayera al vacío cuando se abrió la puerta de un montacargas que debía estar trabada, los tres montacargas de la sucursal Botánico del supermercado Coto (ubicada en Santa Fe al 3700) fueron clausurados. Tarde, claro. Matías trabajaba en el sector verdulería, intentó levantar la puerta del montacargas para cargar mercadería. Al igual que en los ascensores, los montacargas tienen un mecanismo de seguridad para que no se puedan abrir si no están en el piso correspondiente: el que accionó Matías no funcionaba. Diferentes fuentes confirmaron a BigBang que en la sucursal sabían que ese montacargas tenía esa peligrosa deficiencia, pero no habían tomado la precaución de clausurarlo. Matías lo ignoraba porque era nuevo en la sucursal.
Matías tiene 19 años y recién había empezado a trabajar en el Coto.
Jujeño, padre de un bebé de tan solo un mes, Matías pelea por su vida. El accidente se produjo alrededor de las 23.30 del viernes1°. A las 3 de la madrugada, las autoridades del Coto comunicaron su muerte a los empleados y dijeron que sus familiares se iban a llevar sus restos a Jujuy: Matías, sin embargo, no había muerto. El sábado se trabajó como si nada. "Es el día de más venta, se lo iban a perder...", ironiza, con mucho dolor, uno de sus compañeros.
Sucursal Botánico del Coto, donde ocurrieron los hechos.
Luego de que fuera notificada su supuesta muerte, los delegados gremiales pidieron, al menos, trabajar a puertas cerradas. El pedido no fue concedido. Matías cayó desde el sector "-1" al "-4" . Según su prima Giuliana Solís, sobrevive con la ayuda de un respirador artificial. Aunque otro de sus compañeros había informado a BigBang que tenía muerte cerebral, Giuliana dice que eso no es cierto, que está en estado de coma, gravísimo, pero peleando por su vida. En la sucursal de Coto Botánico, por segundo día consecutivo ningún responsable quiso dar la cara.