Una de las primeras medidas que tomaron tanto desde el Gobierno nacional como las autoridades de la Ciudad fue la suspensión de eventos en los que se reúnan en un mismo lugar más de 200 personas como consecuencia de las medidas de prevención para el contagio del coronavirus. Sin embargo durante el fin de semana solamente en territorio porteño se clausuraron 7 locales bailables por el incumplimiento de esas medidas.
La cifra corresponde a los operativos de control que realizó durante el sábado y domingo pasado la Agencia Gubernamental de Control (ACG), a cargo de Matías Lanusse. En total hubo 294 controles, de los cuales 7 terminaron en clausuras como consecuencia de violación a lo que establecía el Decreto 140 que firmó el jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta.
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De esa cifra, dos de las clausuras fueron por violación a esas disposiciones mientras que las cinco restantes fueron como consecuencia del exceso de la capacidad permitida, algo que también se encuentra vinculado a las disposiciones para prevenir la propagación del coronavirus.
Uno de los boliches bailables clausurados fue Ivanoff (Rivadavia al 7500), que estaba abierto al público pese a la prohibición vigente. La clausura de Ivanoff se produjo por el incumplimiento del artículo 3° del Decreto 140 que establece que se “suspende las actividades que se desarrollen en todos los establecimientos inscriptos y autorizados bajo el rubro local de baile clase C”. El otro local clausurado fue el bar Carnal (Niceto Vega 5500), en virtud de que superaba la capacidad de 200 personas establecida por el decreto 140.
Pero no sólo eso. Tanto la AGC como la Policía de la Ciudad identificaron 8 bares que estaban oficiando como “local bailable clase C” que, tal y como sostiene el mencionado decreto, no pueden abrir por el lapso de 30 días.