17 Abril de 2017 06:17
Se llaman “anillos de seguridad” y desde hace más de cuatro meses su presencia llama la atención en los accesos y egresos de la Capital Federal y también en las principales avenidas porteñas. Hoy serán inaugurados oficialmente por el jefe de Gobierno, Horacio Rodríguez Larreta, la gobernadora María Eugenia Vidal y la ministra Patricia Bullrich. Cómo funcionan y para qué sirven.
Desde antes de fin de año ya se observaban algunos pórticos en las principales avenidas de la Ciudad, como Córdoba, a la altura de Bulnes, y Libertador, a metros de Plaza Francia. Llamaban la atención, porque a medida que pasaban los autos, cuatro lectores pantallas led mostraban las chapas patentes de cada uno de los vehículos que los atraviesan. Tras una etapa de prueba, quedaron habilitados.
El anillo digital ubicado sobre la avenida 27 de febrero, en Villa Riachuelo.
Funcionan mediante cámaras que leen las chapas patentes de todos los vehículos, sean las más modernas o las clásicas de tres números y tres letras. Esos datos son registrados y procesados en tiempo real en dos centros de monitoreo, uno ubicado en Vicente López y otro en Puente La Noria. Si se detectan patentes apócrifas o con pedido de captura, enseguida se inician operativos policiales.
En una primera etapa habrá 43 pórticos con 315 cámaras y 128 lectores, pero el objetivo a largo plazo es que haya 74, en todos los accesos y egresos a la Capital Federal. El eje central es “complementar” las tareas de la nueva Policía de la Ciudad, en conjunto con el Gobierno bonaerense. Los datos de las patentes se encuentran cruzados con la base de datos de los vehículos que tienen pedido de secuestro o denuncias.
Se busca controlar si los automóviles y las motos tienen pedido de captura.
Las fase de prueba se extendió porque hubo que implementar un software que permita el registro y la comparación de los datos, así como calibrar las cámaras que capturan las chapas patentes, y que el sistema pueda reconocer los dos modelos de patentes que se encuentran vigentes en la Argentina. Por el momento, no reconocerá las chapas de otros países.
Dentro de la Ciudad se instalaron siete; también se implementan en todos los accesos.
El foco está puesto en generar mayores medidas de seguridad, aunque ya hubo críticas. Los detractores de los “anillos de seguridad” cuestionan que aquellos conductores que sepan que tienen alguna irregularidad, los evitarán, ya que son extremadamente visibles. Desde el Ministerio de Seguridad porteño señalaron tiempo atrás que este sistema se “complementará con retenes móviles en distintos barrios”.
Habrá dos centros de monitoreo, uno ubicado en Vicente López y el otro en Puente La Noria.
Los anillos digitales funcionan mediante el sistema TRASA (Terminal de Reconocimiento Automático de Secuestro Automotor), un equipamiento que permite la rápida lectura de las patentes para verificar en apenas unos segundos si hay irregularidades. En caso de registrar un vehículo con pedido de captura o denunciado, el centro de monitoreo emite alertas y la Policía podrá comenzar una persecución.