Con un bagaje de experiencia que se remonta a 1986 y trabajos en 50 países, el Equipo Argentino de Antropología Forense ahora deberá peritar los restos encontrados en Villarino para determinar si pertenecen a Facundo Astudillo Castro, desaparecido desde el 30 de abril.
Su tarea se centra en la investigación y documentación de casos de violaciones a los derechos humanos y humanitarios que impliquen la búsqueda, recuperación, determinación de la causa de muerte e identificación de las víctimas. No sólo con el fin de restituir los restos a sus familiares sino también para presentar evidencia científica en los tribunales.
Además, el EAAF participa en casos de desapariciones por delitos vinculados a la trata, las migraciones, la violencia institucional y el tráfico de drogas, entre otros crímenes.
El equipo muchas veces interviene a pedido de familiares de desaparecidos en el marco de causas judiciales o proyectos humanitarios de recuperación e identificación de cuerpos. También es convocado como perito y asesor por tribunales locales e internacionales, o comisiones de investigación.
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Paso a paso
El trabajo del EAAF está dividido en distintas etapas, aunque no necesariamente interviene en todas. La primera es la investigación preliminar, en la que se recopilan dos tipos de información: la historia del caso y los datos físicos de la víctima.La segunda es la exhumación de los restos, algo que no es una simple excavación, sino un proceso donde los hallazgos se interpretan en su contexto. Los restos se recuperan de acuerdo con principios científicos y en forma documentada.
Luego sigue el análisis en laboratorio, donde los restos se someten a radiografías para determinar si recibieron proyectiles o golpes, o si presentan lesiones ante-mortem. Después se procede a la la limpieza, rotulado y reconstrucción de los huesos y órganos que presenten traumatismos peri o post-mortem.
También se observan las patologías y anomalías, se elabora una ficha odontológica, se determina la causa y el modo de muerte y se toman muestras para posterior elaboración del perfil genético. Adempas, se analiza la evidencia no biológica asociada, como restos de prendas o proyectiles.
Al momento de realizar el perfil génetico, última etapa del proceso, el EAAF posee un laboratorio forense propio con capacidad de realizar la tarea, incluso a partir de restos deteriorados. Ese perfil después es cruzado con los obtenidos de muestras de sangre aportadas por familiares.