06 Agosto de 2019 10:38
Parece un chiste pero no lo es; sino todo lo contrario. Uno de los cirujanos del Nuevo Sanatorio Berazategui acusado de ocasionar al menos una muerte como consecuencia de mala praxis, Fernando Palladino, es el dueño de la funeraria que se encuentra a menos de una cuadra de la institución. El sanatorio se encuentra en el centro de la escena luego de que se conoció el caso de una jubilada a la que le amputaron la pierna equivocada.
La acusación contra Palladino fue realizada por la abogada otra de la familia de otra de las victimas del Sanatorio, Dionisa Caballero (64 años) que en mayo de 2018 ingresó por una fractura expuesta del brazo y terminó en estado vegetativo. Palladino se encuentra acusado de “homicidio culposo” debido a que la mujer falleció a los pocos días.
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“Hace cuatro meses, a un hombre que murió en una cirugía, que no fue informada por mala praxis, le sugirieron en la clínica Casa Central. Cuando los parientes se dirigieron allí, encontraron a Palladino, que había realizado la operación, con un delantal negro (típico de personas que trabajan en las casas funerarias)”, afirmó en declaraciones a la prensa la abogada la familia de Caballero, Paola Stekloff, quien hoy presentaría once nuevos casos contra el Sanatorio.
La familia de Caballero no es la única que representa Stekloff; junto con ellos trabaja con los familiares de Teresa Angilletta, que falleció a los 71 años en abril de este año. ¿Qué pasó con ella? Fue internada en la institución para que le practiquen una intervención en el píloro, un músculo que conecta el estómago con el duodeno, ya que lo tenía obstruido. Sin embargo, en el quirófano le quitaron la vesícula.
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Luego de tres horas, Palladino salió del quirófano, según consta en la denuncia, y preguntó por los familiares de la paciente “operada de la vesícula”. El hecho llamó la atención de la familia de Teresa, ya que eran los únicos en el lugar.La familia de la señora se acercó al médico aclarándole que la mujer debía ser operada del píloro. Y según contaron, después de escuchar este comentario el médico se sorprendió. Lo insólito y hasta sorprendente ocurrió minutos después, ya que el cirujano regresó rápidamente al quirófano y regresó luego de tres horas para darle el parte a la familia.
El Nuevo Sanatorio Berazategui fue noticia luego de que se conoció el caso de Magdalena Leguizamón; ella se había internado allí para que le amputen la pierna derecha (en la cual ya le habían amputado dos dedos del pie) luego de que no pudieran salvar el miembro de la gangrena. Sin embargo, dentro del quirófano los médicos se equivocaron y le amputaron la izquierda.