Más
Actualidad

Criadero de dengue en Mataderos: el abandono del ex Hacienda, hoy una chatarrería

El barrio de la Comuna 9 es el distrito con más contagios en la Ciudad de Buenos Aires.

21 Abril de 2023 14:34
1682098700172

El brote de dengue sacude a todo el país. En ese sentido, las autoridades sanitarias hacen las recomendaciones pertinentes para evitar la reproducción de mosquitos y, por supuesto, los contagios: uso de repelente, fumigación y, sobre todo, descacharreo, o sea, evitar cualquier objeto que pueda servir para el estancamiento de agua, que es el lugar donde se forman los criaderos de los mosquitos. Lo increíble es que exista un gobierno, como el Porteño, que le pida a los vecinos que limpien cualquier objeto al aire libre pero que, por decisiones insólitas, hayan generado una incubadora de dengue a cielo abierto en el medio de Mataderos. Tal vez por eso, ese barrio reúna la mayoría de los casos de la Ciudad.

 

En el último informe del Ministerio de Salud de la Ciudad las cifras fueron claras: hasta esa fecha (14 de abril) había 9.352 casos con sospecha de dengue, de los cuales 5.177 no tenían antecedente de viaje y 324 con antecedente de viaje a áreas reconocidas de transmisión. Hasta esa fecha, 5.492 porteños eran casos confirmados de dengue, lo que representaba el 14% total del país, detrás de las provincias de Santa Fe y de Tucumán. De los más de 5.000 enfermos de dengue en la Ciudad de Buenos Aires, 948 viven en el barrio de Mataderos. Eso significa el 17% de CABA y que hay una tasa de contagios de 1471,2 personas infectadas por cada cien mil habitantes en esa Comuna 9. Una verdadera locura.

 

Hasta ahora, ninguna autoridad de la Ciudad supo explicar el motivo de dicha cantidad de contagios en la zona. Lo cierto es que Mataderos se transformó en “Capital del dengue” en Buenos Aires, con el triple de casos que en el resto de los barrios vecinos. Tal vez, la explicación no sea tan complicada de encontrar. Con solo buscar un espacio que sirva de reservorio de agua estancada, que esté abandonado, sin higiene y que sirva de criadero de mosquitos en Mataderos hay un lugar ideal. Pero los funcionarios del Gobierno Porteño parecen obviarlo. O quizá no conozcan el barrio.

El 30 de mayo de 2022, el Mercado de Hacienda (mal llamado de Liniers) fue cerrado. Después de 123 años del ir y venir de las vacas al matadero (fue fundado el 21 de marzo de 1900), se decretó su traslado a Cañuelas. Una ley de 2001, votada por la Legislatura, decretó que quedaba prohibido “el ganado en pie” en las calles de la Ciudad. Así se forzó la mudanza del Mercado afuera de los límites porteños. Los vecinos estaban hartos del mal olor, los mugidos y el ruido de los camiones en la madrugada. Hubo varios intentos pero en 21 años, no encontraban el predio correcto para la mudanza. Hasta que el año pasado, la empresa Mercado de Liniers S.A. (formada por los consignatarios de hacienda) compró un predio en Cañuelas y trasladó todo ahí).

 

El tema fue qué ocurrió con las 32 hectáreas del viejo Mercado de Hacienda delimitadas por Lisandro de la Torre, Eva Perón, Murguiondo y Directorio. Una parte fue ocupada por la Policía de la Ciudad que, por orden del Gobierno Porteño, la utilizan como depósito de vehículos secuestrados o patrulleros destrozados. En menos de un año, el Mercado de Hacienda se transformó en una chatarrería, en el que también se mezclan pequeños basurales diseminados por el enorme predio.

No cuesta mucho imaginarse qué puede suceder en 32 manzanas olvidadas en la que conviven viejos bebederos para las vacas y canaletas de las antiguas construcciones, con autos abandonados, chapas, basura y chatarra de todo tipo: el criadero de dengue más grande la Ciudad de Buenos Aires. Y con ello, el descontrol de contagios en un solo barrio de la Ciudad. En síntesis, el mismo descacharreo que el Gobierno Porteño les exige a los vecinos es incumplido en todas las formas posibles por el Estado. Así se pone en riesgo la vida de cientos de ciudadanos.

 

Por el momento, las 32 hectáreas siguen sin control alguno. Por supuesto, continúan siendo un botín de guerra inmobiliario para Juntos por el Cambio. Es que en 2018, bajo la presidencia de Mauricio Macri y, por supuesto, con Horacio Rodríguez Larreta como jefe de Gobierno, la Legislatura Porteña, mayoría del PRO, votó una ley para vender los terrenos de Mataderos. Así se autorizó una venta del 35% para “emprendimientos inmobiliarios” y el resto para hacer plazas, calles, un espacio para el club Nueva Chicago, la mudanza de la clásica feria (en donde el PRO también tomó el control, echó a los antiguos gerenciadores y comenzó a ganar efectivo de los feriantes), un museo de la carne, oficinas públicas y privadas, y hasta un polo gastronómico.

 

Nada de eso sucedió. Con la asunción de Alberto Fernández en 2019, se descubrió que Macri, en realidad, había cedido a la ciudad 11 de los 32 lotes para que los vendiera y así pudiera cancelar un crédito de 170 millones de dólares que tenía con el Gobierno Nacional para la construcción del Paseo del Bajo. O sea, Macri no solo le pagaba la deuda a la Ciudad sino que le daba los activos para pagarla. De inmediato, el gobierno de Alberto frenó toda la movida.

 

Con ese panorama, la deuda de la Ciudad con Nación sigue vigente. Pero el predio del Mercado de Hacienda, ahora a cargo del Gobierno Nacional, quedó en una incógnita. En el medio de todo eso, el Gobierno Porteño firmó un acuerdo por 180 días para vigilar y controlar el predio. Así fue que la Policía de la Ciudad copó el lugar. Las cosas no salieron tal como esperaban. Con el predio convertido en chatarrería de la fuerza policíaca porteña, la salud de los vecinos de Mataderos corre grave peligro. Por ahora, nadie se hace cargo. Lo único que les queda es esperar el invierno y que el frío haga lo suyo.