29 Agosto de 2019 20:01
Normalmente solemos escuchar que hay problemas con la escasez de agua o del petróleo en muchos países, pero lo cierto es que existen otros recursos que son importantes y que, aunque no lo sepamos, ya se están acabando y afectan a varias áreas de nuestras vidas.
Arena
Aunque parezca imposible, en el mundo actualmente se usa más arena de la que la naturaleza puede renovar. Según explicó la ONU, la arena es uno de los materiales sólidos más explotados del mundo, junto con la grava, y la usamos a un ritmo mucho más rápido de lo que puede renovarse.Encontraron 227 cadáveres de niños: la historia del mayor sacrificio de menores en Perú
Para entender un poco más, este recurso tarda miles de años en formarse a través de la erosión, pero se utiliza diariamente a gran escala en la construcción, recuperación de tierras, filtración de agua e incluso para hacer el vidrio en sus ventanas y teléfonos móviles.
Helio
El gas helio es un recurso finito que se extrae de las profundidades subterráneas, y según los expertos, solo nos quedan unas décadas restantes de suministro, ya que las estimaciones señalan que habrá escasez dentro de 30 a 50 años. Aunque el helio se suele utilizar mucho para inflar globos es fiestas, pero lo cierto es que tiene un uso médico esencial: enfriar los imanes que permiten que funcionen los escáneres de resonancia magnética.
Bananas
Aunque no sea un dato muy conocido, la mayoría de las bananas que actualmente se cultivan para la venta comercial están amenazadas por un hongo llamado enfermedad de Panamá. Mayoritariamente, consumimos una variedad llamada Cavendish, las cuales descienden directamente de una planta: como todas son clones, la enfermedad de Panamá tiene el potencial de propagarse rápidamente a través de la población de plantas de banano.Incluso, en 1950 la misma enfermedad casi acabó con la cosecha mundial, lo que provocó que los productores cambiaran del Gros Michel al Cavendish.
Fósforos
El fósforo es un elemento químico fundamental para el desarrollo de los seres vivos, nosotros incluidos, ya que compone la estructura del ADN, los huesos, los dientes y las membranas celulares. Al igual que el potasio y el nitrógeno, las plantas lo absorben del suelo y es básico para fertilizar la tierra y para el crecimiento de los cultivos.Pero además, no solo es biológicamente vital para el humano, sino que también es un fertilizante agrícola esencial que no tiene un sustituto conocido. Actualmente, en lugar de ser devuelto al suelo del que provenía a través de desechos de plantas y animales, el fósforo ahora viaja con mayor frecuencia a las ciudades en alimentos y finalmente termina siendo arrastrado al mar por nuestros sistemas cloacales.
Con las cosas como están, las estimaciones de cuánto tiempo durarán nuestras fuentes actuales de fósforo van de 35 a 400 años. Las reservas mundiales de fósforo son sumamente escasas y el 90% de la producción se concentra en cinco países: Marruecos, que es el principal exportador mundial, seguido por China, Sudáfrica, Jordania y Estados Unidos.
Suelo
La capa superficial del suelo es la capa más externa, de la cual las plantas obtienen la mayoría de sus nutrientes vitales, y aunque no lo sepamos, el Fondo Mundial para la Naturaleza estima que alrededor de la mitad de esa capa de todo el mundo se ha perdido en los últimos 150 años.Se cree que la erosión, la agricultura intensiva, la deforestación y el calentamiento global contribuyen a la pérdida de la capa superior del suelo, y lo más triste es que puede tomar hasta 500 años para que se forme una pulgada de tierra de forma natural.