04 Junio de 2020 10:53
Un concejal de la localidad neuquina de Plaza Huincul presentó un protocolo para volver a realizar “asados seguros” sin riesgo de contagios de coronavirus. No podría superar los diez comensales, sería sólo los fines de semana y no podría extenderse más de cinco horas, y se deberá establecer quiénes son los autorizados para cocinar, tener contacto con la comida y encargarse de servir bebidas.
Por más surrealista que parezca, el planteo es real: la presentación fue realizada por el concejal y ex intendente Gustavo Iril, quien además es médico. Con el protocolo, que aún no fue evaluado por las autoridades sanitarias provinciales, se busca la posibilidad de hacer un “encuentro social gastronómico controlado”, que incluye otras comidas, más allá del asado, lo que sin dudas podría simbolizar un alivio sobre todo para los vegetarianos de Plaza Huincul.
La propuesta incluye comidas como “carne asada al plato, ensaladas, verduras asadas, picada, empanadas y tartas, pizzas, pollo al disco, cazuelas o guiso”. “La idiosincrasia argentina marca que nuestros puntos de reunión se basan en una comida”, sostuvo Iril a La Mañana, de Neuquén.
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Si bien la propuesta resultó llamativa, varias provincias ya habilitaron visitas entre amigos y familiares con tope de hasta diez personas. Incluso varias ya autorizaron la apertura de bares y restaurantes, como Mendoza, Santiago del Estero, Corrientes y Jujuy, entre otras. Lo curioso es que Neuquén no registra casos de coronavirus desde de hace casi dos meses y Plaza Huincul, donde nació la propuesta, no tuvo ni un solo caso de COVID-19.
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CLAVES DEL PROTOCOLO PARA UN ASADO SEGURO
No más de diez personas, para permitir el distanciamiento y la aplicación de medidas de higiene. El barbijo sólo se puede sacar para el momento de ingerir alimentos. Se debe respetar el metro y medio de distancia entre todos los presentes.
Sólo se podrían realizar los viernes y sábados a partir de las 19 y hasta la medianoche. Los sábados y domingos también se contempla el horario de 11 a 16. Sí o sí habrá un anfitrión responsable de llevar a cabo un listado con todos los datos personales y contactos de los invitados, para tener la posibilidad de hacer un rastreo en caso de un eventual contagio. Cada reunión contará con un cocinero y un ayudante de cocina. Serán los únicos que pueden tener contacto con la comida y la bebida antes de la ingesta.
