09 Febrero de 2018 15:10
La muerte de la periodista y diputada porteña Débora Pérez Volpin sigue despertando todo tipo de dudas, críticas e inseguridades. La legisladora falleció luego de realizarse una endoscopía en Sanatorio de la Trinidad de Palermo. El único comunicado por parte del centro privado señala que sufrió un paro cardíaco en medio del estudio.
Los restos de Pérez Volpin fueron velados en la Legislatura porteña.
Lo cierto es que tras la muerte de la conductora, la clínica privada quedó en la mira de su familia y la Justicia, ya que además tiene antecedentes de “muertes repentinas” en su haber. La más recordada fue la de Ricardo Fort, quien perdió la vida en esa misma institución el 25 de noviembre de 2013.
Ricardo Fort falleció el 25 de noviembre de 2013.
Por aquel entonces, un manto de dudas y misterio rodeó la muerte del empresario, uno de los herederos de la compañía chocolatera Felfort y, tal vez, el mediático argentino que más se destacó en los últimos años. Fort se había internado para ser tratado de una fractura femoral, sufrida días atrás de su muerte en Miami.
El posteo del hermano de Ricardo Fort.
Además, padecía de constantes dolores debido a una lesión en su columna y otra en su rodilla. El mediático falleció debido a un paro cardíaco producto de una hemorragia estomacal. El parte médico había detallado que “se mantuvo clínicamente estable y súbitamente presentó un paro cardiorrespiratorio asociado a una hemorragia masiva en el estómago”.
Pese a las denuncias de su familia por supuesta mala praxis, el juez de instrucción Diego Slupski, dictó el sobreseimiento de los médicos que atendieron a Fort previo a su fallecimiento por problemas cardíacos en marzo del año pasado.
Pero al haber ya dos casos que ponen en el foco de las críticas al Sanatorio de la Trinidad, quien decidió romper el silencio fue Anamá Ferreira. La ex modelo de Brasil usó su cuenta de Twitter para relatar su terrible experiencia en el centro privado que tiene como protagonista a su marido.
“A mi ex marido lo operaron en la Trinidad hace unos años de hernia de disco. Cuando vuelve de la operación gritaba de dolor. Habían cortado equivocado. Tuvieron que operarlo de nuevo y yo los amenacé que él tenía que salir caminado o hablaba a los medios”, contó la ex modelo.
En su descargo, además, señaló: “Fue tremendo verlo gritar de dolor y no dejé que volvieran a operarlo hasta que no pasó el tiempo prudente como 14 días de la primera anestesia, porque es muy peligroso una anestesia general una tras la otra. Me puse firme”.
Débora Pérez Volpin falleció a los 50 años. Investigan las causas de su muerte.
Las críticas de Anamá contra el Sanatorio llegan en medio de la causa que inició la familia de Débora Pérez Volpin en el Juzgado Criminal y Correccional 57, en manos del juez Gabriel Ghirlanda, bajo la carátula de "homicidio culposo". La familia busca conocer la verdad, por más difícil que ésta sea, y su abogado se anima a hablar de mala praxis.
