Deporte y fertilidad: por qué es tan importante realizar actividad física a la hora de buscar un bebé

Aunque mucho se habla de los beneficios que trae la actividad física para la vida diaria, poco se sabe de lo bien que hace el ejercicio para favorecer la fertilidad.

En la salud en general, realizar actividad física mejora la circulación sanguínea, reduce el estrés, establece el equilibrio hormonal y aumenta la liberación de endorfinas que son las hormonas conocidas como la hormona de la felicidad, que tienen un efecto analgésico natural ayudando a reducir el estrés, la presión y la ansiedad.

Pero en lo que respecta a la salud reproductiva, tener un estilo de vida saludable favorece la fertilidad tanto del hombre como de la mujer, ya que impacta beneficiosamente de manera física y psicológica contribuyendo al bienestar general de los pacientes que están iniciando un tratamiento de reproducción asistida.

“Hay que lograr un equilibrio entre el Índice de Masa Corporal, que está vinculado al peso y estado metabólico, para tener el mejor estado de salud, tanto física como psíquicamente, ya que esto permitirá obtener óptimas condiciones para afrontar tanto el tratamiento como un futuro embarazo”, explica la doctora Tania Mielnikowicz, especialista en Medicina Reproductiva de WeFIV.

Además, aclara: “El sobrepeso puede incidir negativamente en la fertilidad aumentando las dificultades para lograr la concepción”.

Cómo realizar actividad física de manera segura

Durante un tratamiento de fertilidad asistida, lo ideal es llevar a cabo deportes u opciones de ejercicio con bajo impacto aeróbico, como yoga, natación, caminatas y un ejercicio con gimnasia moderada, que ayuden a bajar los niveles de estrés.

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“La actividad física aeróbica realizada mínimo 3 veces por semana ha demostrado tener una amplia variedad de beneficios, ya que ayuda a prevenir enfermedades cardiovasculares, mejora el funcionamiento de los pulmones en un 50%, aumenta el colesterol bueno y disminuye factores de riesgo para enfermedades. Además, suele ser una actividad que permite a las personas mantenerse en un peso adecuado, poder eliminar presiones, disminuir el estrés y fortalecer la mente”, señala la especialista en Medicina Reproductiva de WeFIV.

Sin embargo, aunque hacer actividad física es bueno, cuando el ejercicio ya pasa los límites, en ocasiones puede complicar los tratamientos de fertilidad.

Por ejemplo, estudios han demostrado que surgen desventajas ante la actividad física intensa en deportes de elite, que inciden en el aparato reproductor tanto masculino como femenino, debido a cambios metabólicos y hormonales que podrían tener un impacto negativo en la fertilidad.

Cuándo es necesario dejar de hacer actividad física

En primera instancia, es aconsejable suspender momentáneamente el deporte de alto impacto físico y/o aeróbico durante la estimulación ovárica, en la cual la mujer se inyecta hormonas y estimula sus ovarios, ya que para una fertilización in vitro, los ovarios aumentan su tamaño y esto podría provocar un mayor riesgo ante una actividad física de alto impacto.

Del mismo modo, en los momentos cercanos al proceso de punción, que es la extracción de los óvulos en los ovarios, que se realiza bajo una sedación, se requiere unas 24 a 48hs de reposo físico. Por más que sea un proceso ambulatorio se recomienda suspender la actividad física durante los días posteriores a la extracción de óvulos.

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Por otro lado, se sugiere no realizar ejercicios asociados a altas temperaturas extremas como ciertos tipos de yoga, luego de una transferencia de embriones. Lo mismo ocurre con cualquier práctica que pueda aumentar la temperatura interna del cuerpo ya que esto podría afectar la implantación del mismo.

La actividad física tiene múltiples beneficios para la salud y, especialmente, resulta muy buena en la búsqueda de un embarazo. Por eso mismo, siempre se recomienda consultar con los profesionales, que son quienes sabrán indicar qué tipo de deportes se pueden hacer y en qué etapas será necesario descansar.