16 Noviembre de 2017 17:19
El miércoles 8 de noviembre, Martina Gómez desapareció de su casa en Luis Guillón, partido de Esteban Echeverría. La niña de 11 años vive con su madre y, según relató la familia, se fue de su hogar a la madrugada y por su propia cuenta. Ahora, sus allegados la buscan y marchan para pedir su aparición.
Martina Gómez desapareció hace más de una semana.
Los padres de la chica están separados, pero el jueves 9 fueron juntos a la comisaría 2° para hacer la denuncia de la desaparición. Allí, aseguraron que Martina había tenido otros episodios parecidos, pero que en esta oportunidad, no había sucedido nada extraño como para que quisiera irse.
“La comisaría segunda se está moviendo muy bien, pero nos faltaría más apoyo porque ellos no dan abasto con todo”, explicó a AUNO, Emanuel, el padre de Martina. Al mismo tiempo, indicó que hasta el momento, desconocen los motivos por los que la nena se fue de la casa.
“Ella se fugó. No sabemos por qué o si ella lo tenía planeado. Lo sabremos cuándo aparezca”, aclaró y sostuvo que tanto él como su ex mujer están muy preocupados.
La nena salió de su casa a la madrugada y nadie la volvió a ver.
El martes pasado, la familia llevó a cabo una marcha, y junto a los vecinos, partieron desde la Plaza Mitre. De ahí, se dirigieron a la Fiscalía de Instrucción N° 2 de Monte Grande, que lleva adelante la investigación.
Del mismo modo, los padres de la chica fueron recibidos por el intendente Fernando Gray, quien se comprometió a ayudar en la búsqueda y dispuso el apoyo del municipio y de la policía local.
Hasta el momento, se sabe que existieron varias llamadas de testigos que aseguraron haber visto a la niña acompañada de una persona, pero todas las declaraciones la ubican en distintas localidades, entre ellas Lanús y Monte Grande.
Del mismo modo, la policía efectuó un rastrillaje en la Villa 31, ubicada en Retiro, después de que un taxista asegurara haber visto a la niña junto a una chica rubia mientras pedían monedas en la calle.
La madrugada que salió de su casa, Martina vestía una remera gris, zapatillas bordó y llevaba una mochila grande de color marrón y con detalles negros y grises.
