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Detienen a monja por encubrir a los curas que abusaban de niños sordos en Mendoza

La religiosa fue denunciada por las víctimas de violación de la institución para niños hipoacúsicos. A ella acudían luego de ser vejadas, en busca de apoyo. Pero contrariamente, ella encubría a los autores.

31 Marzo de 2017 20:21
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La justicia de Mendoza ordenó la detención de una monja por el posible delito de encubrimiento de los abusos cometidos a chicos hipoacúsicos en el instituto Antonio Próvolo, de Luján de Cuyo.

Kosaka kumiko

La monja japonesa fue detenida hoy.

La monja japonesa Kosaka Kumiko, fue señalada por una testigo por su supuesta colaboración y encubrimiento de los dos curas detenidos por este caso. Según relató la testigo, la religiosa le ponía pañales a los chicos abusados para ocultar su sangrado. 

"Ella fue en el último testimonio señalada como la persona que le puso el pañal a esta menor de edad, de cinco  años, ocultando y teniendo conocimiento que había sido violada. Lo cual, la hace cómplice primario del delito del abuso",señaló Sergio Salinas, abogado querellante en esta causa.

Caso próvolo

El instituto de hipoacúsicos donde se producían los abusos.

"El hecho es muy crudo, es una niña menor de edad que ha sido violada anal y vaginalmente y termina buscando ayuda y resguardo en otra persona, que es la monja Kumiko, y no sólo que no la ayuda, sino que le pone un pañal ocultando el sangrado", dijo el letrado.

Para Salinas, "desde el primer día se notaba que el caso no podía ser sencillamente un acto violatorio aislado sino una sistematicidad de violaciones, abuso, corrupción de menores, en que participan personas de forma activa" o por omisión, como por ejemplo, "poner pañales o no denunciar".

Caso Próvolo

El cura Horacio Corbacho, uno de los principales acusados.

La testigo, que hoy es adolescente, dio su declaración en lenguaje de señas y en Cámara Gesell. Todo ello condujo al fiscal Gustavo Stroppiana a secuestrar nuevos elementos de prueba del edificio del Próvolo.

La causa tiene hasta ahora cinco detenidos, de los cuales dos son sacerdotes: Nicola Corradi (82) y Horacio Corbacho (56). Los otros tres, son el celador del instituto, Luis Ojeda (50), el asistente y monaguillo, Jorge Bordón (55) y el jardinero, Armando Gómez (46).

"Los chicos poco a poco se están animando (a denunciar), porque es un efecto dominó como le llaman ellos, empiezan a tener más valor y el miedo se va gracias al apoyo terapéutico", concluyó el abogado.

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