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Día Mundial del Cáncer de Mama: a qué síntomas estar alerta y qué cuidados hay que tener

Las mujeres deben estar atentas ante cualquier cambio en sus pechos y pezones, para evitar así que la enfermedad se detecte cuando ya está muy avanzada.

19 Octubre de 2018 15:20
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Este 19 de octubre es el Día Mundial de Lucha contra el Cáncer de Mama, una de las enfermedades que según la Organización Panamericana de la Salud es la segunda causa de muerte más importante entre las mujeres de América Latina.

El 19 de octubre es el Día Mundial de Lucha contra el Cáncer de Mama.

Además, Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), se detectan en Argentina alrededor de 20 mil nuevos casos de cáncer de mama por año, pero aún así, todavía son muy pocas las pacientes que se realizan los controles necesarios regularmente.

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En relación a esto, desde la Fundación Avon confirmaron que cuatro de cada diez mujeres mayores de 40 años no se hacen la mamografía anualmente, por lo que resulta importante destacar que lo único que puede evitar que el cáncer de mama avance es el control con el ginecólogo y la realización de los estudios habituales.

Además, es importante estar atentos a los síntomas que pueden indicar que algo anda mal, lo que significa que las mujeres deben estar alerta y revisarse una vez al mes ante posibles cambios en sus mamas.

Para evitar el cáncer de mama lo mejor es que las mujeres se hagan el autoexamen una vez al mes.

Los profesionales indican además que hay que advertir en esos controles mensuales si existe algún nódulo o si se nota el endurecimiento de la mama, al igual que hay que fijarse si se produjeron cambios en la forma del pecho, como podría ser el hundimiento del pezón o la salida de protuberancias.

Finalmente, es importante visitar al médico si los pechos duelen o si al apretar los pezones sale líquido o sangre del pezón.

Hay varios síntomas que son indicativos de que algo no anda bien.

Aunque no se pueden detectar los factores de riesgo a los que están expuestos todas las mujeres, la OMS sí identifica algunos indicadores que pueden hacer a la paciente más propensa, como es el caso de los factores hereditarios o la exposición prolongada a los estrógenos, ya sea por tener una menopausia tardía, un embarazo cerca de los 40 años o el consumo prolongado de métodos anticonceptivos orales.