El 22 de abril se celebra en todo el mundo el Día de la Tierra, fecha establecida por las Naciones Unidas para concientizar sobre la triple crisis planetaria: el cambio climático, la pérdida de biodiversidad y la contaminación. Además para hacer un llamado a todos los gobiernos, a las empresas y a la ciudadanía en general a poner en práctica soluciones y formas de desarrollo que preserven el planeta.
Este tema es urgente, por más que el gobierno de Javier Milei insista en que es solamente "una etapa cíclica". Es que, si no se da respuesta a la triple crisis, nunca se compensará el desequilibrio del funcionamiento de la naturaleza y la destrucción de los ecosistemas que ponen en riesgo la continuidad de las especies: varios animales y tipos de planta están en peligro de extinción.
En este mismo contexto contexto, las empresas juegan un papel crucial en la promoción de soluciones sostenibles y en la adopción de prácticas que preserven nuestro planeta. Muchas de ellas son las causantes directas de los gases que generan el efecto invernadero, la contaminación del aire y de los mares en cada día de producción.
"El cambio climático, las acciones del hombre en la naturaleza, así como los crímenes que perturban la biodiversidad, como la deforestación, el uso del suelo, la producción agrícola y ganadera intensiva o el creciente comercio ilegal de vida silvestre, pueden acelerar el ritmo de destrucción del planeta", expresa la ONU en este día y de hecho, en este mismo marco, se invitó a todos los gobernantes y las ONGS del mundo a reunirse en Ottawa para negociar los términos del Tratado Mundial de las Naciones Unidas sobre el Plástico.
Mientras los máximos exponentes del mundo intentan buscarle una solución a toda esta catástrofe, en Argentina, hay una empresa pionera en el reciclaje polietileno y polipropileno, ubicada en Ensenada que desde 2006 aspira a animar a toda la población y a la clase política a tomar conciencia de la importancia de mantener limpio el planeta tierra: Amiplast S.A. Su nombre, "Amigos del Plástico", refleja el compromiso con la solución ambiental para los desechos plásticos.
En el marco del Día de la Tierra, BigBang conversó con la directora ejecutiva de Amiplast, la arquitecta María Eugenia Roig, que resaltó la importancia de darle una segunda vida a los plásticos para reducir así la contaminación ambiental y promover la economía circular: "Como empresa, hacemos capacitaciones e incentivamos a la comunidad sobre la importancia de la clasificación en origen, pero necesitamos que deje de ser utopía para muchos y sea una responsabilidad de todos", expresó.
Una mirada negacionista
Los grandes empresarios y el Gobierno son actores fundamentales a la hora de concientizar y generar reglas y estructuras que sean importantes y que puedan cumplirse para mejorar no solamente la calidad humana sino también cuidar el medio ambiente. Hay una preocupación generalizada por los ecologistas y las empresas de reciclaje ante la mirada negacionista del cambio climático, que podría llevar a la acumulación de plásticos y residuos que no son degradables y pueden "enfermar" los suelos, provocando así mayor contaminación y por consiguiente, más castigo hacia la Tierra.
"Hubo algo que hizo que empecemos a tomar conciencia sobre la importancia de cuidar el medio ambiente, pero todavía falta, necesitamos leyes que obliguen el uso del reciclado. Creemos que si realmente todos queremos lo mismo, un mundo mejor, desde nuestro lugarcito debemos contagiar educación", expresó María Eugenia. "Nosotros reciclamos los plásticos a niveles industriales y vuelve a tener otra vida útil, de esa manera disminuimos la contaminación ambiental, lo que entra en la fábrica sale como materia prima y se transformará en otra cosa, asegurándonos que no irá a los basurales", explicó sobre el trabajo específico de la planta.
Por otro lado, es necesario plantear el concepto de la "economía circular", recurso que utiliza Amiplast para darle una vida útil a los materiales en desuso durante el mayor tiempo posible mediante la recolección, el reciclado y la regeneración de productos y de materiales.
Pero la economía circular no se trata solo de reciclar materiales, sino también de diseñar productos que faciliten su reinserción en su ciclo de vida tantas veces como sea posible. En este sentido, Amiplast se esfuerza por desarrollar soluciones innovadoras que promuevan la sostenibilidad a largo plazo: "El plástico es uno de los materiales más problemáticos en términos de su impacto en el medio ambiente dada su larga vida hasta su desintegración", explica María Eugenia.
"Muchos plásticos no son reciclados y terminan en vertederos, ríos y océanos, dañando los ecosistemas naturales. Es por esto que mi empresa, Amiplast SA, tiene como misión la recolección, separación y reciclado de plásticos para darles una segunda vida útil", indicó. Remarcó también que la economía circular no se trata solamente de reciclar materiales: "Se trata también de diseñar productos que faciliten su reinserción en su ciclo de vida tantas veces como fuera posible"
"Hay una responsabilidad empresarial para construir una economía sostenible y justa. Las empresas tienen el poder y la responsabilidad de adoptar prácticas sostenibles en todas las áreas de su actividad, desde el diseño de productos hasta la gestión de residuos. Deben ser transparentes en sus prácticas y compromisos sostenibles y colaborar con otros actores de la sociedad para lograr un cambio real y duradero", insistió la arquitecta .
El Día de la Tierra nos recuerda no solamente la importancia en la que la sociedad debe actuar de forma colectiva para proteger y preservar el planeta, que es el único hogar, pero también es un llamado a las empresas y a los Gobiernos que demuestran que es posible hacer la diferencia mediante el compromiso y la responsabilidad empresarial, para unir criterios, sancionar leyes y contribuir económicamente hacia un futuro más sostenible.