Luego del 7 de Octubre, día que el movimiento islamita Hamás lanzó miles de cohetes a la Franja de Gaza en un ataque sin precedentes que desató un conflicto con Israel, la contraofensiva se volvió más feroz En respuesta a este hecho, el primer ministro de Israel, Benjamín Netanyahu, declaró que el país estaba "en guerra", movilizó más de 300.000 reservistas para el ataque, que se llevó miles de civiles.
La denuncia fue hecha por el brazo armado de Hamás, que confirmó a través de un mensaje difundido por Telegram que cerca de 50 rehenes israelíes que estaban retenidos en la Franja de Gaza murieron bombardeados por su mismo país. ”Las brigadas Qassam estiman que este número”, dijo el movimiento islamista palestino.
Momentos después de este comunicado por parte del movimiento palestino, Israel sumó en otra publicación en su cuenta oficial de X (ex Twitter), afirmando que: “Shadi Barud, subdirector de la Dirección de Inteligencia de Hamás, ha sido eliminado por un ataque aéreo de las FDI”.
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Sin embargo, el gobierno israelí se mostró preocupado por la cantidad de rehenes (aproximadamente 224) que Hamás raptó desde el estallido a principio de mes y enfatizó: ”Esta cifra va evolucionando en función de la información que vamos obteniendo. Seguirá cambiando. Los esfuerzos para traer de vuelta a los rehenes son una prioridad absoluta”, precisaron.De la cantidad de rehenes secuestrados, la Cancillería Argentina confirmó que un total de 21 argentinos se encuentran en manos de grupos armados en Gaza y que sus familias piden su liberación inmediata, cuyo respaldo está consolidado por el presidente Alberto Fernández, quien se mostró “comprometido con la causa”.
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La ONU acusa a Hamás de continuar con “una guerra sin sentido”
Los representantes de Israel y países árabes intercambiaron graves acusaciones en una reunión organizada por la ONU, en la que se debatió sobre el conflicto y se pidió el alto el fuego. Sin embargo, la discusión se fue de las manos tras el fracaso del Consejo de Seguridad en tomar medidas de paz.
"Israel está convirtiendo Gaza en un infierno perpetuo en la tierra. El trauma perseguirá a generaciones enteras", declaró el canciller jordano, Ayman Safadi, quien remarcó además: "El derecho a la autodefensa no es una licencia para matar impunemente, el castigo colectivo no es autodefensa, es un crimen de guerra".
Por su parte, el embajador palestino, Riyad Mansour, intentó defender a su pueblo y expresó: "Para detener esta locura, tienen la oportunidad de hacer algo, de enviar una señal importante. Elijan la justicia, no la venganza".