El arzobispo de Buenos Aires, el cardenal Mario Poli, encabezó el Tedeum por el Aniversario de la Revolución de Mayo. Con el presidente Mauricio Macri presente en la Catedral Metropolitana, Poli emitió un fuerte mensaje en contra del proyecto para despenalizar el aborto. Además, aseguró: “Debemos desconfiar de los logros instantáneos y derrotas prometeicas”.
Macri llegó minutos antes de las 10 de la mañana a la Catedral, acompañado por la primera dama, Juliana Awada, la vicepresidenta Gabriela Michetti, el jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, el presidente del Senado, Federico Pinedo, y el presidente de la Cámara de diputados, Emilio Monzó, entre otros.
En un breve discurso, Poli lanzó un duro rechazo al proyecto de despenalización del aborto que es debatido en la Cámara de diputados, y que sería debatido el 13 de junio en el recinto.
El arzobispo porteño pidió “cuidar la vida de punta a punta”, y remarcó: “La defensa del inocente que no ha nacido debe ser clara”. “Decimos que vale toda vida”, insistió, al tiempo que señaló: “Para Dios no hay excluidos”.
Macri, junto a la primera dama, Juliana Awada.
“Si la propuesta es optar por una u otra vida, nosotros apostamos a que vivan las dos”, remarcó Poli.
En menor medida Poli hizo referencia a la situación social y política del país. Sostuvo que “los cambios sociales y culturales se dan en procesos que demandan tiempos que nos trascienden” y que “se extienden más que los períodos de un gobierno”. “Debemos desconfiar de los logros instantáneos y de las derrotas prometeicas”, lanzó el cardenal.