El impacto de los tarifazos en los impuestos no sólo queda acotado a los servicios que deben pagarse en una propiedad, sino que también afectan a todos aquellos que habitan en edificios que, en los últimos meses, vieron el monto de sus expensas abultarse hasta un 40 por ciento más.
El monto de las expensas siguen en alza acorde suben los servicios.
Para ello, ya no basta con medir el consumo en el hogar acotando el uso de la electricidad o gas. Hoy los consorcios se ven obligados a ahorrar con medidas básicas que intentan bajar los números finales, que los propietarios deben pagar mes a mes.
El uso de las calderas es un tema central en cuanto a gasto de gas, pero es muy complicado prescindir de ellas o regular su uso cuando todo un edificio depende de ello.
La graduación en la que generalmente se encuentra una caldera es de 65° y la forma que encontraron los encargados es bajarlo sólo a los 60 grados. Lo cual es muy poco e incide de una manera menor en los costos finales. La inclusión de un termostato que pueda regular el prendido y el apagado de la caldera también es una opción a tener en cuenta para limitar el consumo.
Las calderas sólo se pueden bajar unos 5° en los edificios.
Otro aspecto a tener en cuenta es el alumbrado del edificio. En primer término, y a esta altura, todos los edificios deberían contar con lámparas bajo consumo en todos sus espacios. Sobre todo en aquellos que están iluminados durante la mayor parte del día. Y si se puede prescindir del alumbrado en aquellas áreas comunes menos utilizadas, el nivel de reducción de consumo será mayor y podrá verse reflejado al final del mes.
La reducción del alumbrado en las áreas comunes es una medida básica para ahorrar.
Asimismo, aquellas propiedades que cuentan con laundry o servicio de lavandería, llamaron a los vecinos a hacer un uso más eficiente y consciente de este amenity, para así ahorrar tanto en agua como en electricidad.
Los vecinos deberían adaptarse al uso discriminado del laundry.
Sandra González, presidenta de la Asociación de Defensa de los Consumidores y Usuarios de la Argentina, consignó al ser consultado por el matutino La Nación que "la situación es compleja" y dijo "como no existe una tarifa diferenciada, el consumo de los consorcios de propiedad horizontal se factura, en muchos casos, como si se tratara de comercios o empresas. Casi en todos lados donde hay servicios centrales se ha puesto una temperatura mínima. Hay determinadas cosas que no se tuvieron en cuenta [al ajustar los cuadros tarifarios] y se van a tener que revisar, de lo contrario van a empezar los reclamos judiciales puntuales y no sería lo más conveniente".
Gastos que se suman
A pesar de ello, hay costos que son inevitables a un edificio y que tienen que ver con su mantenimiento y al que ningún propietario escapa. Pero si se toman algunas medidas básicas, al menos se podrá mantener estable el costo de las expensas y la relación entre los vecinos, la cual siempre se ve afectada cuando lo económico entra en juego.
Hay costos básicos de mantenimiento a los cuales no escapa ningún vecino.
“No existe el consorcio ideal”, explica Mariel Kernes?, administradora y autora del libro Anécdotas de un Administrador de Consorcios.
Sin embargo, la especialista brinda algunos consejos básicos para que las expensas no varíen mes a mes.
Si el edificio debe tener algún tipo de mantenimiento, o bien algún imprevisto requiere de la tarea de algún profesional, se debe pedir al menos tres presupuestos para los trabajos que haya que realizar. "Tener en cuenta -al efectuar la evaluación y selección- que el presupuesto más barato puede resultar el más caro a mediano plazo, ya que puede llegar a ser necesario rehacer trabajos al poco tiempo", indica Kernes.
Controlar las "verdaderas" horas extras que cumple un encargado y que estás se le paguen como es debido, pero que no sea una costumbre el hecho de pagarlas y sea considerado como un derecho adquirido.
Efectuar las compras de insumos de limpieza en proveedores mayoristas para obtener mejores precios.
Otro aspecto que encarece considerablemente las expensas son los propietarios morosos, ya que el resto de los habitantes de una propiedad horizontal deberá hacerse cargo de esta "falta de aporte" al consorcio, al menos hasta que la situación se regularice.
Mantener estable el monto de las expensas, no sólo beneficia al propietario actual, sino que también redundará en la posibilidad de mantener competitivo el valor del inmueble frente a futuras ventas o alquileres.
¿Cómo están conformadas las expensas?
Según Kernes la expensas cumplen una fórmula básica bajo la cual se rigen. Es la fórmula 40-30-20-10:
40% corresponden a sueldos y cargas sociales de los encargados. En los casos de los edificios que cuentan con servicio de seguridad, éste se ubica también entre los primeros puestos.
30% se destina al mantenimiento de espacios comunes y arreglos en unidades en las que corresponda al consorcio. De acuerdo a la reforma del Código Civil y Comercial, este porcentaje aumenta ya que las cañerías pasan a ser comunes y deben ser reparadas por por todos los vecinos.
20% son abonos fijos, tales como el mantenimiento de los ascensores, la fumigación y jardinería, entre otros.
10% se lo llevan los honorarios de los administradores y gastos administrativos.
Pese a que muchos piensan que en aquellos edificios con amenities el costos de las expensas se elevan exageradamente, Hernán Siwacki, Socio Gerente de Capital Brokers Propiedades indica que estos no suelen representar más del 10% del costo de las expensas, y el porcentaje puede ser aún menor a medida que aumenta la cantidad de unidades. "Un porcentaje mínimo si lo comparamos con los costos que representan los servicios de seguridad privada o de los encargados, que constituyen más del 60% del total de las expensas", remarca.
El 20% de las expensas está compuesta de gastos fijos.
En materia de legislación, a principios de julio la Legislatura de Buenos Aires derogó la ley 5464 que buscaba regular la vida de los consorcios y controlar a los administradores. "Hemos trabajado intensamente con todas las partes para modificarla y que queden satisfechas, pero los vecinos seguían manifestando su disconformidad", afirmó el legislador porteño de PRO, Daniel Del Sol. "En sus reuniones vecinales, Horacio Rodríguez Larreta escuchó el reclamo de los ciudadanos y decidió anular la ley. A partir de esto, la intención es comenzar un debate amplio para poner en marcha un nuevo proyecto porque consideramos que es necesario actualizar el sistema actual del registro de consorcios", concluyó el diputado de la Ciudad.