05 Octubre de 2015 18:08
Muy pocos argentinos se reconocen posicionados arriba o abajo en la escala social. El 88% se considera de clase "media" o "media baja" aún cuando pertenecen, por su nivel socioeconómico, a otros estratos. Pero hay un dato que refleja un punto inquietante del pensamiento nacional, y tiene que ver con los factores necesarios para llegar a la cima de la pirámide social.
Casi 9 de cada 10 argentinos se considera de clase media o media baja.
Para el 24%, tiene que ver con el fraude o la corrupción,y para el 21% la herencia familiar. Sólo el 16% mencionó la educación y sólo el 13% el esfuerzo, mientras que para el 7% es una cuestión de suerte, y para un 6%, tener contactos.
La corrupción y el fraude como método de ascenso social.
Estos números surgen del 4° Estudio sobre Felicidad, -Estructura Social-, realizado por la Facultad de Ciencias Económicas de la Universidad de Palermo (UP) y la consultora TNS Gallup, que indaga sobre la percepción que tiene la población acerca de las distintas clases sociales y su pertenencia.
El Decano de la Facultad de Ciencias Económicas de la UP, Gabriel Foglia, explicó que este estudio "tiene como objetivo analizar las condiciones materiales del contexto y del entorno que influyen en la satisfacción y felicidad de las personas".
Y detalló que el 47% dijo ser de clase media baja, el 41 de clase media-media, el 10% se identificó como de clase baja, apenas el 2% se definió como de clase media alta, y ninguno se reconoció de clase alta.
Sólo 2% se reconoció como clase media alta, y ninguno de clase alta.
Los motivos de la pobreza
En cuanto a los motivos por los qué la sociedad cree que las personas menos favorecidas están en esa situación, las respuestas son variadas. Un 29% del total de los encuestados entiende que se debe al nacimiento y el ambiente en que viven, el 26% la falta de educación, para el 19% el esfuerzo insuficiente, mientras que 11% lo atribuyó a la mala suerte, 3% a la falta de trabajo y 2% culpó al Gobierno .
El esfuerzo y la educación no son muy valorados según la encuesta.
Los ingresos marcan la diferencia
El informe señaló que si bien existe una gran dispersión entre lo que consideran que es el ingreso de la clase más rica de la población, la mitad de los encuestados mencionan importes superiores a los $50.000 en una familia tipo de cuatro personas. Y la mayoría coincide que para que una familia tipo no pertenezca al segmento más pobre de la población debería tener ingresos entre los $10.000 y $20.000.
Impuestos y planes
Con respecto a las políticas redistributivas, 53% de los entrevistados está totalmente de acuerdo, con que el Estado utilice dinero proveniente de los impuestos que pagan los sectores de mayores ingresos para aplicarlo en los programas sociales para los sectores más pobres de la sociedad, mientras que un 28% está totalmente en desacuerdo o en desacuerdo.