Días atrás, un gran operativo policial comenzó en Río Grande, Tierra del Fuego, para buscar pistas sobre Sofía Herrera, la niña que desapareció hace más de diez años mientras paseaba junto a su familia en un camping.
Nuevas derivaciones en el caso de Sofía Herrera.
Los rastrillajes fueron ordenados por el juez de instrucción 2 de Río Grande, Daniel Cesari Hernández, luego de que un suboficial retirado de la Policía había apuntado al hecho de que una persona se había llevado a la niña y tal vez había sepultado su cuerpo en esa zona.
El testigo aseguró que la menos "había caído en una trampa para zorros y que otra persona la había enterrado". Se trata de una versión que se encuentra en el expediente desde el 2012, pero que nunca fue investigada. El testimonio derivó en el pedido de tres allanamientos, todos en un radio de 80 kilómetros de la ciudad de Río Grande.
Sin embargo, el caso tuvo hoy una derivación insospechada: luego de dos allanamientos en la ciudad bonaerense de Ayacucho, una adolescente de 14 años que podría ser Sofía fue hallada en poder de un grupo de gitanos.
La esperanza de los padres
"Cuando ves que tu hija crece en un dibujo es muy impactante. Lleva tiempo procesarlo. Ojalá mi hija esté así como luce en las imágenes. No la vi crecer y verla así en el dibujo es fuerte" había contado en diálogo con BigBang María Elena, madre de Sofía, hace unos días.
Sofía el día que desapareció (izq.) ,y tal cómo luciría hoy (der.).
"Mi marido está muy angustiado, está muy mal en esta fecha. Es mucho para él", agregó. "Además de todo lo que debimos enfrentar. Recordamos todo lo que pasó. Es un día difícil. Significa revivir todo. Pensar lo que hicimos cuando empezamos a buscarla, la relación con los medios de comunicación, las campañas, las marchas. Tantas cosas".
Sofía así luciría en la actualidad.
El día de la desaparición
La mañana del domingo 28 de septiembre de 2008 era un día más para la familia. Con un pareja de amigos - Paloma y Silvio- y sus hijos, decidieron realizar un pic-nic. Era la primera vez que llevaban a la pequeña Sofía, de 3 años, al camping John Godall, ubicado a la vera de la Ruta 3, entre Río Grande y Tolhuin, en Tierra del Fuego.
Llegaron al lugar cerca de las 11:20. María Elena cursaba la semana 16 del segundo embarazo, que la tenía a mal traer. Paloma y ella esperaron en la camioneta a los hombres, que habían ido a buscar un lugar donde acampar. Diez minutos y tras recorrer sólo 100 metros después, los maridos regresaron para avisar el lugar elegido, pero una pregunta resonó: ¿dónde está Sofía?.
El recuerdo de Sofía.
A la tarde, cientos de personas se sumaron al rastrillaje de la Policía y los bomberos, mientras que en días posteriores se sumaron aviones de la Armada, y efectivos de la División Servicios Especiales de la Policía de Ushuaia y de Río Grande.
Prefectura, Gendarmería, la Policía Federal, la Policía de Investigaciones de Chile, y hasta el Equipo Argentino de Antropología Forense y el FBI aportarían su ayuda luego. Los arroyos de la zona fueron explorados por equipos de buzos profesionales.
Durante los primeros días posteriores a la desaparición, la versión del secuestro fue la más persistente. Uno de los niños que jugaba con Sofía relató que se la llevó un hombre de cabello largo de alrededor de 50 años.
El único imputado en la investigación fue Alberto Urrutia, uno de los cuidadores del camping, señalado por el delito de "sustracción de menores". Luego de permanecer preso un año, fue sobreseído y desvinculado de la causa en 2010 luego de que no se hallara ninguna prueba en su contra.