La sede de las Madres de Plaza de Mayo en Congreso no sólo está en la mira de la prensa local. Hasta allí también llegan decenas de personas que de forman disimulada se acercan en la búsqueda de estrategias y herramientas para conseguir Pokemones.
Sucede que a tan sólo dos días de su lanzamiento, Pokémon Go tomó la ciudad de Buenos Aires convirtiendo cada espacio público en un punto de encuentro para fanáticos.
La Sede de las Madres no sólo es un punto de concentración de militantes y policías.
Hoy el lugar donde militantes resistían el arresto Hebe de Bonafini es una Pokeparada, es decir un espacio para obtener pokebolas y otros artefactos que permiten cazar pokemones.
También el Congreso de la Nación se convirtió por estos días en un Gimnasio nivel 3 para el juego de realidad aumentada de Niantic y Nintendo. Allí se realizan combates contra un líder que debe ser derrotado. A este edificio se suma el palacio de gobierno de Perú, la Casa Rosada, que es un gimnasio nivel 7, y la Pirámide de Mayo.
Asimismo, las zonas linderas al Obelisco, la peatonal Florida, Puerto Madero, el Planetario y el parque Thays, congregaron la mayor cantidad de seguidores, dado que en la zona hay una alta concentración de "monstruos".
Otro espacio donde se congregaron los fanáticos de Pikachu fue Unicenter, el centro comercial de Martínez, donde los oficinistas en su horario de almuerzo no dejaron pasar la ocasión de atrapara a alguno de estos personajes. Lo mismo se replicó en el Dot Shopping.
Pero entre los lugares curiosos que pueden albergar pokeparadas o gimnasios se encuentran lo locales del Partido Obrero (PO). La explicación a este fenómeno reside en un juego de realidad aumentada anterior al Pokemon Go. Se trata de Ingress un juego -también perteneciente a Niantic- que tenía por objetivo plantar portales en lugares de estética urbana diferente a la habitual. Esta información fue heredada por Pokemon Go, quien los convirtió en pokeparadas.
Los murales del PO convertidos en pokeparadas.
Los murales que se encuentran cerca de los locales del PO, se distinguen por su artística disrruptiva y se encuentran en diversos puntos de la ciudad y el conurbano. Allí los jugadores se abastecen de armas para salir a la caza de pokemones.
Lejos de indignarse los militantes del PO vieron con buenos ojos esta iniciativa. "Bienvenidos los jugadores de Pokemon Go que se acerquen a esas pokeparadas donde, además de obtener beneficios para sus performances en el juego, tendrán la posibilidad de acercarse a reductos de militancia obrera y socialista y centros de organización de la clase trabajadora y la juventud", manifestaron desde su sitio web.
En los locales del Partido Obrero también "se esconden" armas para cazar pokemones.
Al igual que ocurre en otros lugares del mundo, las pokeparadas podrían ser auspiciadas por marcas o ser establecidas en locales comerciales para así atraer a posibles consumidores.
Las marcas ya empiezan a pensar en auspiciar las pokeparadas.
Aunque aún no hay cifras locales, antes de su llegada unos 70.000 fanáticos ya esperaban poder bajar la aplicación en la Argentina. A nivel mundial las descargas superaron ya los 100 millones y se llevó el primer puesto entre las aplicaciones más descargadas de iPhone.