Con la excusa del coronavirus, el cura abusador Julio César Grassi pidió el arresto domiciliario por temor a contagiarse. Su defensa argumentó que integra el grupo de riesgo, ya que tiene una supuesta “afección respiratoria”. El abogado que representa a una de las víctimas calificó el planteo de “insólito” y consideró que “de ningún modo puede obtener la excarcelación”.
Grassi fue condenado a 15 años de prisión por abuso sexual y corrupción de menores en la fundación Felices los Niños y todavía le quedan once años de cárcel por delante, ya que si bien lleva seis años preso, tiempo atrás recibió una segunda condena a dos años de prisión por malversación de fondos de la fundación. De hecho, también está siendo investigado en un tercer expediente por el desvío de donaciones que eran para la fundación hacia la cárcel. Esa causa todavía no llegó a juicio oral.
En medio del planteo de miles de detenidos para obtener el beneficio de la prisión domiciliaria por la pandemia de coronavirus, la defensa de Grassi apeló a un supuesto problema respiratorio para impulsar la morigeración de la pena. El planteo fue presentado ante el Tribunal Oral en lo Criminal N° 1 de Morón, según reveló Gallego, el abogado querellante en la causa por abuso sexual. Además, Grassi argumentó que en el penal de Campana dio positivo un guardiacárcel.
Gallego detalló que hay una irregularidad en el planteo de Grassi: explicó que el cura pedófilo hizo el planteo ante el Tribunal Oral que lo condenó, pero como la causa tiene sentencia firme - la Corte Suprema ratificó el 21 de mayo de 2017 la condena por abuso sexual - el control de la prisión está en manos del juzgado de Ejecución Penal.
“Por algún motivo o picardía de Grassi, nunca fue elevado a un juzgado de ejecución, con lo cual el órgano a cargo de controlarlo es el mismo que lo condenó”, se quejó Gallego en declaraciones al diario Clarín. Además, el abogado criticó el pedio de Grassi, que consideró “insóilito”, y sostuvo que si fuera aprobado por el Tribunal Oral, sería obtenido “por fuera del “sistema lógico legal”.
Pero además, aportó un dato más: recordó que el ex abogado del cura abusador es el mediático Miguel Ángel Pierri, quien ahora es funcionario del Ministerio de Seguridad bonaerense. Según Gallego, “es un disparate” el planteo de Grassi, y consideró que “de ningún modo un delincuente sexual como Grassi puede obtener la excarcelación”.