20 Agosto de 2017 12:36
La aparición de los restos de la avioneta que había desaparecido el pasado 24 de julio, minutos después de haber despegado desde el aeropuerto de San Fernando, no desalentó a las familias de las tres personas que viajaban en ella. Aunque las autoridades todavía no pudieron precisar si los cuerpos se encuentran o no dentro de la nave, ellos todavía esperan “el milagro”.
"Ahórrense palabras innecesarias en este momento. Nuestra esperanza está intacta y esperamos ese abrazo con más ganas que nunca
Ángela Barbero, la mujer del piloto, Matías Ronzano.
“Ahora más que nunca necesitamos buenas energías! Ahórrense palabras innecesarias en este momento. La ayuda que necesitamos es el rezo, la fe, la plegaria, la energía y la luz porque nuestra esperanza está intacta y esperamos ese abrazo con más ganas que nunca”, escribió en Facebook Ángela Barbero, la mujer del piloto, Matías Ronzano.
"Seguimos con la esperanza a flor de piel
Y es que tras la divulgación de la noticia, cientos de personas se anticiparon y le escribieron emotivos mensajes de condolencias, pese a que todavía nadie pudo confirmar la muerte de ninguno de los tripulantes. “Seguimos con la esperanza a flor de piel”, sumó en un posteo redactado en el muro de uno de sus contactos.
Matías Ronzano (30) y Facundo Vega (25), los pilotos de la avioneta.
Los mensajes no hicieron más que afectar al entorno familiar, que por estas horas sigue el minuto a minuto del operativo dispuesto por la jueza Sandra Arroyo Salgado para encontrar a los pasajeros. Tres buzos tácticos están “peinando” la zona aledaña al pantano donde se halló el avión.
El pantano en el que se encontraron los restos de la avioneta.
“Exijo respeto. Hay tres familias. No pueden hablar, difamar e inventar cualquier cosa. Posiblemente a vos te resulta gracioso; a las familias, amigos, conocidos o personas de buen alma que apoyan la búsqueda, no: los lastima. No difundas información que no haya sido publicada por las familias Ronzano, Aristi o Vega”, reclamó Pía Ronzano, hermana de Matías.
Matías Aristi, el hijo del dueño de Aibal. El único pasajero.
Las autoridades de la Administración Nacional de Aviación Civil ya anticiparon que el operativo puede llegar a durar días, dadas las condiciones climáticas y geográficas del lugar. “Si en estos días la incertidumbre no nos quitó la fe, ahora menos. Esperamos un milagro y sólo necesitamos volver a verlos, abrazarlos y terminar con esta pesadilla”, remató Pía.
