02 Mayo de 2018 08:42
Pasaron 63 años desde que el público pudo ver por última vez el cuadro “La mesa herida” de Frida Kahlo. Fue en una exposición que tuvo lugar en Varsovia, capital de Polonia. La mexicana lo había donado a la ex Unión Soviética, con la idea de que la obra recorra el territorio comunista, pero alguien, ¿se lo robó?
Más de 150 cuadros de la artista desaparecieron tras su muerte.
El misterio detrás de la desaparición del cuadro fue revivido por la curadora Helga Prignitz-Poda, curadora de la exposición Frida Kahlo y Diego Rivera: contexto polaco. “Es una de las razones por las que hicimos esta exhibición, alguien en Polonia podría recordar haber visto esta obra alguna vez, en algún lugar”, explicó la organizadora.
La otra Frida, los oscuros y tortuosos secretos que todavía ocultan sus cuadros
"La mesa herida", el cuadro en el que canalizó su bronca por la infidelidad de Rivera con su hermana.
En efecto, lo único que se sabe del lienzo es que estuvo en Polonia. Muchos creen que todavía permanece en el país europeo o que podría haber sido quemada, tal como sucedió con otros 150 cuadros de Kahlo.
Frida lo pintó durante una de sus tantas separaciones de Diego.
“Debe estar en alguna parte, una pintura tan grande no pudo haber desaparecido tan fácilmente; al menos que haya terminado quemada en un horno en la década de los cincuenta”, sumó la curadora de la exposición que tiene lugar en el centro cultural Zamek de la ciudad polaca de Poznan.
La pintora murió el 13 de julio de 1954.
En la exposición, la curadora decidió mostrar una réplica en blanco y negro del cuadro con la pregunta: “¿Alguien puede decirnos qué pasó con esta pintura perdida o dónde podemos encontrarla?”. Se trata de una de las pinturas más llamativas de la obra de la mexicana por su inusual tamaño: 1.2 metros de alto por 2.4 de largo.
Frida donó el cuadro a la ex Unión Soviética.
El autorretrato, que fue pintado durante una de sus separaciones de Diego Rivera, la muestra en el centro de una mesa ensangrentada, escoltada por un esqueleto, un personaje precolombino y Judas. Se suman dos niños en el margen izquierdo, que representan a sus sobrinos -Isolda y Antonio- y un ciervo en la cabecera de la mesa.
El cuadro expone el dolor de la artista luego del affaire de Rivera con su hermana Cristina.
El Judas, en efecto, representa a Rivera. Así lo retrató Frida luego de enterarse de la única infidelidad que jamás le pudo perdonar: el affaire que mantuvo con su hermana, Cristina.
