por Natalia Torres
19 Febrero de 2018 01:59Hoy, la gaseosa Fanta está identificada con una imagen juvenil y descontracturada. Sin embargo, su origen tiene que ver con una iconografía muchísimo más oscura: la nazi.
Fanta actualmente cultiva una imagen juvenil y colorida.
La historia comienza en los años '30, cuando Adolf Hitler gobernaba el país y la sección alemana de Coca Cola estaba a cargo del empresario Max Keith.
En aquel entonces, cuando Estados Unidos aún no estaba en guerra, comerciaba libremente con Alemania y la Coca Cola era sumamente popular allí. Tanto que, incluso, llegó a esponsorear los Juegos Olímpicos de Berlín en 1936 y se rumoreaba que el mismísimo Führer disfrutaba de un buen vaso de la bebida de vez en cuando.
Sin embargo, en 1942 Japón -aliado de Alemania- bombardeó la base aérea norteamericana de Pearl Harbor, lo cual determinó que Estados Unidos entrara en la Segunda Guerra Mundial y cesara su intercambio comercial con los países enemigos.
Economía de guerra
Enfrentando la posibilidad de quiebra total de la empresa ante la imposibilidad de importar las materias primas para la fabricación de Coca Cola, Keith tuvo que encarar el urgente desafío de crear un producto que permitiera a la fábrica seguir en pie.
Publicidad alemana de Fanta de la época de guerra.
Así, trabajando con su equipo de químicos, el magnate creó una receta adecuada a los duros tiempos de racionamiento de guerra y basada en residuos de otras industrias.
De esta manera, mezcló ralladura de frutas, fibra y pulpa de manzana, azúcar de remolacha y suero derivado de la elaboración de queso. La bebida resultante fue bautizada Fanta acortando la palabra "fantasy" y comercializada con la vaga descripción de "Brauselimonade mit Fruchtgeschmack, es decir "gaseosa con sabor a fruta".
La primera versión de Fanta incluía productos de desecho de otras industrias.
La idea resultó: las ventas de Fanta se elevaron no sólo porque una de las pocas opciones disponibles en el mercado, sino porque también la población alemana encontró otros usos. Así, en años donde el azúcar era casi imposible de conseguir, la bebida era utilizada como endulzante.
Renovación
El fin de la guerra, en 1945, trajo buenas noticias para Keith: gracias a sus gestiones para evitar la quiebra de la filial alemana de Coca Cola, fue nombrado presidente de toda la división europea de la empresa.
En los años '50, la Fanta renació en Italia y luego fue introducida en Estados Unidos.
Y aunque Fanta cesó su producción con la caída del nazismo, en 1955 fue relanzada con una nueva receta sabor naranja, la cual debutó en Italia para luego llegar a Estados Unidos.