26 Mayo de 2020 12:26
El ministro de Educación, Nicolás Trotta, no descartó que las provincias argentinas menos afectadas por la pandemia de coronavirus puedan volver antes al dictado parcial de clases. Se trata de la primera vez que el funcionario habla sobre la posibilidad de un regreso progresivo a nivel nacional.
"Dada la circulación del virus, que en algunas regiones del país tiene impacto y niveles de contagio más fuerte, es posible que en algunos lugares del país se pueda comenzar con antelación", expresó en diálogo con Radio El Destape, agregando que habría que tomar "todos los cuidados necesarios para lo que implica transitar una pandemia".
Trotta también advirtió que el retorno a clases estará sujeto "a la realidad edilicia de cada una de las escuelas" y la decisión final respecto a cómo adaptarse a los protocolos correrá por cuenta de la escuela.
"No sólo hay que pensar en el trabajo en el aula, sino los espacios comunes y el propio ingreso al establecimiento educativo", expresó. "Son todos componentes que no son homogéneos y eso va a implicar decisiones muy concretas".
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"Hay que analizar todavía el despliegue de distanciamiento social dentro de los establecimientos, y cómo reaccionar ante un posible contagio dentro de los establecimientos en medio de las clases", agregó Trotta.
En relación al sistema de calificación que se impondrá para la mayoría de las escuelas del país, el ministro adelantó que recién se analizará entre agosto y septiembre, ya que antes deberá determinarse "cuándo se va a volver físicamente a las aulas" y desarrollarse "una instancia de evaluación de respuesta del sistema educativo en el marco de la pandemia".
El regreso en otros países
En Europa, el primer país en reabrir establecimientos educativos fue Noruega. En Holanda, por ahora, sólo volvieron a clases los cursos de jardín de infantes y primaria.En Serbia, mientras tanto, guarderías y jardines reciben sólo a niños cuyos padres tienen que trabajar. Deben presentar un certificado médico demostrando que están bien de salud y un justificativo de los empleadores de los padres indicando que no pueden cumplir sus tareas laborales en casa.
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Lo mismo sucede en Croacia, aunque incluyendo también a las escuelas primarias, donde la asistencia es opcional. En Zagreb, la capital del país, los pupitres y las sillas fueron separados entre 1,5 y 2 metros, los cursos no pueden tener más de 15 alumnos y los establecimientos reciben desinfecciones periódicas.
