El próximo martes se inicia otra etapa en la investigación sobre la denuncia de violencia tras la mediática separación de Federico Bal y Barbie Vélez. Un equipo de médicos forenses evaluará el cuerpo de la hija de Nazarena Vélez para determinar si sufrió o no las lesiones y golpes que había denunciado.
Según la joven, en las fotos los moretones fueron disimulados con maquillaje.
Todo comenzó con una producción de Barbie para la revista Gente, donde quedaron expuestas unas marcas que tenía en sus brazos. Luego de que quedaron al descubierto los moretones en el cuerpo de Barbie, ella denunció a Federico Bal. En su defensa, él argumentó que jamás la había golpeado y sostuvo que los moretones podían remitir a la fatídica noche de la separación. Fede dijo que la tuvo que sostener con fuerza durante el momento de furia de la joven, en especial cuando, según sus dichos, “intentó incendiar el departamento” que compartían en el barrio de Belgrano.
Ambos asumieron que eran muy celosos.
BAL COMPLICADO
Ayer se conoció que la denuncia de Federico Bal -en la que sostenía denunció que su ex novia intentó incendiar su ropa- no fue validada por los peritos. El joven bailarín y actor aseguró que Barbie había intentado prenderle fuego a sus pertenencias, con el riesgo de que el fuego se descontrole y se destruyera el departamento que compartían.
El peritaje realizado por especialistas de bomberos de la Policía Federal determinó que en el lugar “sería negativa la presencia de hidrocarburos de interés”, por lo cual se interpreta que nadie intentó jamás iniciar un incendio.
Cada uno rehizo su vida dedicándose al trabajo o saliendo con amigos, pero sin retorno al amor.
En la denuncia original, Fede Bal sostuvo que la morocha se había enfurecido luego de descubrir unos mensajes en su celular y que “empezó a tirar toda su ropa en el cuarto que destinaban a escritorio, a romper el monitor y procedió a rociar sobre el piso o ropa un frasco que aparentemente contenía acetona, luego tomó un encendedor y prendió fuego”. Pero no pudo demostrarlo.
Para la Justicia, la denuncia carece de sustento.