24 Abril de 2018 06:58
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Apostar por los básicos
Con prendas más tradicionales se pueden armar muchos outfits distintos, sin que se note que estás repitiendo estilo. Así, una misma calza con una camisa o un pullover grandote te puede ofrecer dos opciones en una misma semana.
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La diferencia la marcan los accesorios
Una bufanda, un pañuelo, un gorro o un collar pueden levantar mucho el look que elijas. ¿Recomendación? Aprovechar los accesorios de abrigo para marcar la diferencia.
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Vestirse en capas
Cualquiera que haya intentado comprar un tapado o abrigo sabe que los precios están por las nubes. De modo que hay algunas opciones alternativas para poder abrigarse, sin que el bolsillo lo sufra.
Las remeras térmicas, por ejemplo, no se ven y te dan una base calentita muy importante. Lo completás con un sweater y una camperita liviana de media estación (que además están en liquidación).
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La practicidad de la cartera grande
Este otoño-invierno vuelven a imponerse los bolsos XXL y es una gran noticia para la platea femenina. ¿El motivo? Nos permiten guardar todos los accesorios de abrigo como guantes, gorros y bufandas.
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Tener dos buenas "perlitas" en el placard
Aunque las bajas temperaturas se imponen, siempre es recomendable tener dos buenos vestidos para eventos que no sean en el exterior. Aplica la misma lógica para el día a día: un vestidito clásico negro se puede transformar en cinco outfits sólo cambiándole zapatos o accesorios.
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Aprovechá las ofertas con amigas
Aunque los precios son elevados, muchas marcas ofrecen promociones acumulables. Así, si llevás dos o más prendas podés acceder a descuentos de hasta el 70 por ciento. ¿Lo bueno? Podés ir con amigas y comprar sólo una prenda.