11 Abril de 2017 13:16
La vocación de servicio de Micaela García no nació de la nada. Y si hay algo que lo demuestra es el excepcional discurso conciliador de su padre, Néstor, luego del femicidio que se llevó a su hija.
A pesar del dolor, Néstor García permanece reflexivo.
Ante un clamor social que, muchas veces, eleva la espada de la venganza, la pena de muerte y el castigo ojo por ojo para delincuentes, García -quien es decano de la UTN de Concepción del Uruguay- arroja un manto de comprensión y reflexión.
Y lo demostró desde su primera declaración a la prensa luego de que se hallara el cuerpo de su hija. "Más allá de lo que uno sienta, se debe seguir el orden institucional, por lo que no se debe hacer justicia por mano propia. Vamos a vivir para tratar de lograr una sociedad más justa, como pretendía Micaela", dijo frente a las cámaras y entre lágrimas.
"Sé que Micaela nos va a seguir guiando. El dolor tiene que servir para cambiar la sociedad", agregó marcando también un camino claro: el homenaje personal a su hija, que siempre quiso empujar su ciudad, su país y el mundo hacia un lugar mejor; será elegir la tolerancia.
"Somos todos culpables"
Esa misma idea fue, justamente, la que García remarcó hoy cuando se dirigió a los periodistas que cubrían el funeral de su hija. "Soy un padre que está en pie, en defensa de los ideales de Micaela", subrayó por si quedaba alguna duda.
En esa misma charla con la prensa, también anunció que estaría dispuesto a recibir, junto a su esposa Andrea, a Maximiliano, hermano gemelo de Sebastián Wagner, el asesino de Micaela.
Y su voluntad de no apuntar dedos acusadores hacia nadie incluso se extendió a Carlos Rossi, el juez que le brindó la libertad condicional al femicida a pesar de los informes periciales adversos.
García aseguró que recibiría a Maximiliano, el hermano gemelo del asesino de su hija.
"El juez Rossi es la cara visible de algo que no funciona", aclaró García. "No hay culpables puntuales, somos todos culpables por permitir ciertas cosas y dejarlas pasar, con el pensamiento de que 'total a mí no me tocó'. Se tiene que terminar eso".