19 Febrero de 2018 17:38
Era un momento de plena felicidad. Este lunes se realizó la inauguración (para la prensa) del flamante restaurante La Tomasa, en el predio donde se encuentra el comedor de Margarita Barrientos. Se trata de un antiguo vagón de subte de la línea A qué prestó servicios desde 1913, que fue donado por el gobierno porteño y restaurado para convertirse en una suerte de buffet.
Margarita Barrientos en La Tomasa.
Pero cuando todas las miradas se dirigían al Ministro del Interior Rogelio Frigerio -quien se disponía a cortar la cinta inaugural- al ministro de Desarrollo Urbano y Transporte de la ciudad, Franco Moccia, y a la propia Barrientos, parte del lugar se desplomó. El deck donde estaban ubicados los dirigentes se abrió a la mitad y todos terminaron en el piso.
El vagón fue donado por el gobierno porteño.
Mientras que Frigerio logró caer de pie, Barrientos sufrió un leve golpe en su rostro. A pesar del accidente, el restaurante no sufrió daños ni modificaciones. Solo se cayeron algunas macetas y objetos que estaban sobre el buffet, según detalló la Nación. El local se encuentra a 30 metros de Los Piletones, el histórico comedor en el que Barrientos trabaja día a día.
Asi quedó el deck.
Lo cierto es que, indignada, Barrientos dialogó con América TV y advirtió que le iniciará acciones legales a la empresa Alto Diseño, los encargados en armar la estructura. "La empresa Alto Diseño que contratamos hizo todo muy mal. Se vino todo abajo de repente. Gracias a Dios no hubo heridos. Solo me golpeé la rodilla", dijo.
Todo se derrumbó cuando subió el ministro del Interior.
Y agregó: "Ahora el doctor Burlando se está encargando de todo porque ellos pasaron un presupuesto y se les abonó. Estaba mal hecho. La estructura de abajo no estaba bien. Por suerte no se lastimó la gente que estaba allí".
