por Natalia Torres
19 Septiembre de 2016 09:52Parte del buen funcionamiento de los mecanismos del erotismo, para muchos, tiene que ver con que esté unido a la noción de cercanía. De nada sirven a veces cuerpos inalcanzables enlazados con el lujo: la sensualidad es mucho más efectiva si la fantasía no está lejos de la realidad.
La web impulsa el erotismo alternativo.
Esa es una de las ideas que impulsa a SuicideGirls.com, web norteamericana de vocación erótica cuya ley central está expresada de manera fuerte y clara: "Lo que algunas personas piensan que nos hace extrañas, diferentes o arruinadas, nosotras creemos que es lo que nos hace hermosas. Esta es nuestra idea de la redefinición de la belleza".
¿Y en qué consiste esa redefinición? En presentar desnudos de modelos con estéticas alejadas del ideal Playboy. Tatuajes, piercings, tinturas de colores y, sobre todo, cuerpos reales y naturales son bienvenidos en el universo de las Suicide Girls.
@HyliaSuicide is one #Pokemon we wish we could catch! Link in bio to see more SG Pokemon fans 3>
El sitio funciona, en parte, como una red social en la que tanto las modelos como los miembros arman sus propios perfiles. Las chicas pueden pasar años como "hopefuls", es decir, subiendo sus sets de fotografías sin recibir paga.
Alrededor de 6000 "hopefuls" y 3000 Suicide Girls oficiales -que sí cobran por sus imágenes- forman parte de la web, y los miembros pagan una cuota promedio de un dólar diario para aceeder a las imágenes.
Belleza argentina
"Promueve a las nerds, 'ñoñas', gamers y cosplayers. Todos estilos que siempre han sido relacionados con 'la incogibilidad'", explica elocuentemente Valkyria, modelo de la web y una de las pocas argentinas en formar parte del staff permanente.
Valkyria es una de las chicas que representa a Argentina en Suicide Girls.
Su viaje personal comenzó, como el de muchas adolescentes y veinteañeras: con el smartphone en la mano. "Me gusta sacarme selfies y fotos, mirarlas, probar caras y poses frente al espejo desde que nací, más o menos", recuerda agregando que "de adolescente admiraba las Suicide Girls, pero lo consideraba inalcanzable".
Todo cambió de la mano de un encuentro casual con una chica que se sorprendió por sus profusos tatuajes y le preguntó si modelaba para el sitio. "Me contó que una amiga suya era Suicide Girl y cuando lo sentí alcanzable, me alegré muchísimo", cuenta Valkyria.
El primer set de fotos de la modelo argentina fue elegido para publicación al instante.
Así, en sociedad con una de las pocas fotógrafas oficiales del sitio que viven en Argentina, la joven aspirante a modelo ideo su primer set de fotos, que se convirtió en un hit: fue elegido para su publicación cuatro meses después de realizado y Valkyria recibió su primera paga por parte de la web, "graduándose" al instante como modelo oficial.
"Yo leía atónita cómo gente de todo el mundo me escribía cosas hermosas y nadie me juzgaba", cuenta la modelo que, sin embargo, no siempre tuvo la misma suerte. "Una compañera de la facultad a la que consideraba mi amiga me gritó que le parecía más noble que limpiara pisos antes que 'muestre el culo en Internet'. Las mujeres machistas abundan", se lamenta agregando que otras amistades dejaron de hablarle o le prohibieron a sus novios que la sigan en Instagram.
"Mi novio ama que modele", asegura Valkyria.
Sin embargo, su núcleo de afectos más cercano aceptó sin dramas su status de Suicide Girl. "Mi familia me apoya, saben que soy una laburante y trabajo desde muy chiquita. Me bancan porque saben que es un rol, un álter ego, un juego, un laburo. Y mi novio ama que modele", revela Valkyria.
Al natural
Según las reglas de SuicideGirls.com, los sets fotográficos que sus modelos muestran en la web deben estar compuestos por entre 40 y 60 imágenes con luz y locaciones naturales. El maquillaje debe ser sutil y las imágenes apuntan a mostrar una progresión: la modelo comienza vestida y termina en un desnudo total.
La estética alternativa de las Suicide Girls le da la bienvenida a tatuajes y piercings.
Además, cada conjunto de fotografías suele enmarcarse en una temática visual. Uno de los favoritos de Valkyria fue el que realizó utilizando un ejemplar de la saga A Song of Ice and Fire -en el cual se basa la serie Game of Thrones-, jugando con un vestuario "nerd" de suéter, medias de lana, manta tejida y lentes de lectura.
Uno de los sets de Valkyria se inspiró en el libro "A song of ice and fire", en el cual se basa "Game of thrones".
"Verme desnuda y sentirme sensual siendo simplemente yo misma sin ropa reanimó y redireccionó mi libido. No es lo mismo que verse al espejo", confiesa Valkyria. "Cuando entras a SG, ya rompés cualquier ápice de complejo que puedas tener con tu cuerpo. Hay chicas que tienen miles y miles de seguidores y están muy lejos de los 90-60-90. Y es hermoso".
Detrás del lente
La "otra pata" del trabajo de Valkyria para Suicide Girls es Stephanie Colello, la fotógrafa que realiza sus tomas y junto a quien idea sus escenarios y fantasías eróticas.
"Hacía tiempo estaba con ganas de comenzar a fotografiar desnudos, pero nunca se había dado la posibilidad", le cuenta
Colello
a
BigBang. "Quería explorar ese lado de la fotografía y pude comenzar a hacerlo de la mano de
Valkyria. Hace ya varios meses que estamos trabajando en conjunto, ambas nos sentimos muy cómodas con este proyecto y tratamos de meterle toda la garra posible.
Siempre me gustó retratar y poder expresar el ser de las personas en una fotografía, y eso es básicamente lo que continúo haciendo, con el plus del desnudo y la estética alternativa".
"Creo que ser mujer hace más cómoda la sesión y ayuda a que las modelos se puedan soltar más, que es clave para lograr una buena toma", admite la fotógrafa. "Todas las mujeres tenemos algún complejo, y que haya 'una más' detrás del lente creo que hace más fácil todo. Hay un plus en todo esto, y es que el set en muchos casos se convierte en una experiencia divertidísima y hay chicas que ganan muchísima confianza viendo el resultado final".
Y más allá de que Colello se ha topado con gente "que prejuzga el sitio, porque piensa que es fotografía pornográfica" o "se queda asombrada, como si fuese una especie de pecado o tabú", prefiere quedarse con lo positivo que resulta "celebrar la diversidad de cuerpos y mujeres, y demostrar que los cánones de belleza que están representados socialmente no lo son todo y hay más detrás de toda esa imagen plástica que representa lo 'bello'".