Una amenaza de bomba recibida telefónicamente por las autoridades del Senado obligó a suspender las reuniones previstas en esa Cámara del Congreso.
Fuentes legislativas aseguraron que en la llamada anónima se habría apuntado al Salón Illia como lugar de colocación del supuesto explosivo.
El Senado, foco de otra amenaza de bomba.
Allí se estaba desarrollando un seminario sobre extractivismo minero que convocó el senador Fernando Solanas, de Proyecto Sur.
En el lugar también se encontraban Norma Morandini, del Frente Cívico cordobés, y Rubén Giustiniani, del socialismo, además de unos 300 asistentes a la charla-debate.
La amenaza se registró durante un seminario convocado por Pino Solanas.
Un escuadrón de la Policía Federal se hizo presente y recorrió las instalaciones del Palacio Legislativo, pero no se encontró nada.