¿Mala dieta? ¡Afuera!
por Alejo Paredes
31 Julio de 2024 14:56
Facundo Pereyra (MP 94615) es una eminencia en su campo, tal y como lo fue su papá Juan Carlos al convertirse en cirujano, gastroenterólogo y el primer endoscopista que tuvo la Patagonia. Nacido en la bella ciudad de Cipolletti, provincia de Río Negro, este médico gastroenterólogo es reconocido mundialmente por haber aportado una visión que combina medicina tradicional con medicina alternativa, con el objetivo de mejorar la calidad de vida de sus pacientes.
En su práctica clínica, integra la medicina tradicional y la funcional, enfocándose en los desequilibrios de la microbiota intestinal, que pueden generar una amplia variedad de síntomas y enfermedades, tanto digestivas como de otros sistemas del cuerpo. Su trabajo no sólo ha dado buenos resultados en muchos pacientes, sino que lo han llevado a protagonizar conferencias alrededor de todo el mundo y publicar libros donde hace referencia a sus métodos y a lo que ocurre cuando la microbiota empieza a fallar.
Este jueves 1° de agosto, a las 19, Pereyra estará dando una charla en el Ciudad Cultural Konex sobre cómo "Resetea tus dos cerebros" y "desinflamar los intestinos para recuperar la salud". Allí, el profesional hablará sobre su programa de salud digestiva "B15: Programa de reseteo intestinal", enfocada en la salud intestinal como origen de diversas enfermedades que van -según le advirtió a BigBang- desde infecciones urinarias y gastroenteritis a erupciones en la piel, fatiga crónica y dolores musculares.
Según explica, el intestino funciona como un filtro que controla lo que se absorbe en la sangre. Un intestino permeable puede causar diversos problemas de salud, y el desequilibrio de la microbiota puede afectar no solo al sistema gastrointestinal sino a todo el cuerpo, funcionando como un órgano endocrino. Cuando la microbiota se empobrece, se reduce el número de especies bacterianas, hongos, virus y arqueas, lo que puede desencadenar enfermedades silenciosas.
Si bien remarca la importancia de visitar a él o a un médico experto de confianza de cada paciente y realizar controles gastroenterológicos adecuados a la edad y estado de salud, Facundo destacó que algunos de los inconvenientes derivados del mal funcionamiento de la microbiota intestinal son problemas digestivos, que son los más habituales (distensión abdominal, diarrea o constipación); problemas derivados de un sistema inmunológico cansado o hiperactivo y problemas que afectan al cerebro con diversos síntomas vinculados a la salud mental. Entre las cuales, subrayó: insomnio, ansiedad y depresión.
En una charla con este portal, Pereyra remarcó la importancia de cuidar el intestino, al cual no sólo no dudó en calificarlo como el órgano más importante del cuerpo, sino que además lo define como "el segundo cerebro y también es el primer órgano inmunológico" debido a que -explicó- el 70% de las células del sistema inmunológico viven en la pared del intestino. "En los motivos para que nuestro intestino se enferme y que se vuelva tóxico para el cuerpo, casi siempre hubo un problema en la microbiota que generalmente responde a antibióticos, analgésicos, estrés crónico o a lo que llamamos ´mala dieta´", le explicó a este sitio.
¿Qué es la microbiota intestinal?
- La microbiota intestinal es el conjunto de bichitos que vive en nuestro intestino, bacterias, parásitos, virus, hongos y arqueas, que funcionan como un órgano en nuestro cuerpo porque son trillones de microorganismo, pesan en kilo y medio aproximadamente, y funcionan produciendo sustancias benéficas para el cuerpo. Entonces nuestro cuerpo las necesita y cuando la microbiota está enferma, ciertas sustancias no se producen, y pueden generar enfermedades autoinmunes y hormonales de la mujer.
¿Cuáles son estas sustancias?
- Las sustancias que producen estos bichitos en su conjunto son vitaminas, sustancias antidepresivas como la serotonina, también producen unos ácidos grasos que protegen al intestino, protegen la permeabilidad del intestino y lo mantienen intacto en su función de barrera-. Cualquier cosa que desequilibre la microbiota puede enfermarnos por distintos motivos, porque hay menos vitaminas y menos sustancias antidepresivas, lo que afecta a nuestro estado de ánimo.
También podemos tener enfermedades en el cuerpo y nuestro intestino puede empezar a filtrar toxinas porque la microbiota deja de proteger a la permeabilidad intestinal y empiezan a filtrar toxinas que nos enferman a distancia, son sustancias viajeras que van a la sangre y dan síntomas que nadie asocia al intestino, como por ejemplo dolores de cabeza, hormigueos, erupciones en la piel o alergias, sobrepeso, hinchazón de manos , la falta de energía y problemas articulares.
¿Cómo se vincula el intestino con la salud mental?
- Mira esto es muy reciente, pero hay trabajos que asocian los problemas intestinales con los síntomas de salud mental, que son síntomas de insomnio, ansiedad y/o depresión. Hay varios mecanismos que aplican esto, uno es la microbiota. Cuando el intestino está inflamado, en general la microbiota está pobre: hay menos serotonina y el paciente tiene síntomas de insomnio, ansiedad y depresión.
Por otro lado, cuando el intestino está más permeable, esas toxinas que se filtran pueden ir a la sangre y generar inflamación del cerebro, la llamada neuroinflamación que desemboca en insomnio, ansiedad y depresión. Esas son las dos teorías fundamentales y después hay otras que son un poco más difíciles de explicar. Hay como mecanismos de mensajería directa entre los bichitos del intestino y la microbiota del cerebro. En general esas tres son las principales razones.Cuando tenemos un paciente con síntomas de salud mental, tenemos que ver dos escenarios.
Uno es el paciente que tiene cero síntomas digestivos, a ese paciente no vamos a pensar que su intestino está enfermando a su cerebro. Ahora, cuando el paciente tiene síntomas de ansiedad, depresión y insomnio y a su vez, tiene algún síntoma digestivo como reflujo, hinchazón y a su vez tiene estos síntomas digestivos típicos del mal funcionamiento intestinal como son dolores de cabeza, hormigueos, erupciones en la piel, hinchazón de manos, cansancio o dolor articular, ahí podemos sospechar que su intestino puede estar activando o empeorando sus psiquis. En esos casos es cuando nosotros proponemos un método de reparación intestinal o de "reseteo intestinal", y esto puede afectar directamente al cerebro, desinflamándolo y generando cambios anímicos importantes.
¿De qué trata este "reseteo"?
- Es poner a descansar el intestino durante 7 días para que se cure solo. Lo mismo sucede, por ejemplo, cuando ponemos un yeso en un hueso fracturado, le ponemos un escenario ideal para que el hueso se cure. Lo mismo pasa en todos los órganos, todos los órganos de nuestro cuerpo tienen un potente de autosanación y en el intestino sucede lo mismo, nada más que por supuesto no podemos poner un yeso en el intestino, pero si podemos brindarle al intestino las condiciones ideales para que se repare.
¿Qué son las condiciones ideales? es sacarle todo lo malo y ponerle todo lo bueno. Sacarle el gluten, los lácteos, el azúcar, algunas frutas, algunas verduras que puedan inflamar. Con eso, en 7 días el intestino se desinflama y empieza a mejorar los síntomas fuera del intestino, incluida ña salud mental, la energía, articulaciones o piel. La pregunta del millón es ¿qué se come esos días? bueno... huevos, nueces, pollo, pescado, marisco, 10 frutas, 30 verduras, algunos cereales, agua, té y ya llegaste.
Cuando el intestino se recupera, empieza la segunda etapa que es descubrir cuáles son los alimentos que te estaban enfermando en forma silenciosa. El día que vos agregas ese alimento y te vuelve el síntoma, declarás ese alimento como probablemente sospechoso y eso genera que luego del proceso, vos sepas cuáles son los alimentos que se están enfermando. Por ejemplo, trigo. Ahí hay que ver qué dosis tolerás del trigo, no es lo mismo comer 4 veces al día trigo que una vez por día, ¿no?
¿Y qué pasa si este reseteo falla?
- Por supuesto esto nunca tiene que reemplazar a la consulta médica. Aclaro esto de entrada porque nuestra propuesta es algo complementario, mi sueño es que esto llegue a la salud pública y que todos los especialistas así como mandan a sus pacientes al psicólogo, a yoga o medicación, que los manden al reseteo intestinal. El 80% de los pacientes que tienen los síntomas típicos, diseñamos un autotest que pueden ver en la página, mejoran y el 20% no. Para ese 20% que no mejora tenemos distintos protocolos. A algunos les sacamos la histamina en la dieta, a otros le damos antibióticos locales, en especial los que tienen los síntomas adjetivos, a otros le damos antimicóticos locales y a otros le damos medicación para la ansiedad o para la depresión.
¿La falla en la microbiota intestinal siempre está vinculada a la alimentación o hay algunas otras razones?
- Está muy buena la pregunta. En los motivos para que nuestro intestino se enferme y que se vuelva tóxico para el cuerpo, casi siempre hubo un problema en la microbiota que generalmente responde a antibióticos, analgésicos o estrés crónico. Pero también están las intolerancias alimentarias, personas que comen gluten y lácteos, son intolerantes y no se dan cuenta, y después están las personas que comen muy mal, que es el 80% de los argentinos y a lo que nosotros llamamos "mala dieta".
La mala dieta está presente en aquellos que comen mucho procesado, gluten azúcar refinada, toma alcohol y fuma, todo eso también hace que el intestino se vuelva a permear y se enferme. Después hay otras casos, por ejemplo, sacarse la vesícula es otro de las motivos de que muchas personas empiezan a enfermarse y a veces tener un virus digestivo o el post-virus que es el estado del intestino más permeable y que se enferma; y también los estados sexuales de la mujer, los embarazos, la menopausia... pueden también generar estos aspectos.
