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Una eminencia

Falleció Ginés González García: gran bastión médico, adalid contra la Iglesia e impulsor de la despenalización del aborto

El ex funcionario y médico cirujano estaba internado en el Centro Quirúrgico Callao.

18 Octubre de 2024 13:12
Ginés González García

A los 79 años, falleció este viernes Ginés González García, ex ministro de Salud de la Nación. El médico cirujano y ex funcionario murió en el Centro Quirúrgico Callao, donde estaba internado. Nacido en San Nicolás de los Arroyos, fue un destacado político y profesional de la salud que lo largo de su carrera no sólo ocupó importantes cargos en el ámbito de la salud pública, incluyendo el de ministro de Salud en tres ocasiones distintas y el de embajador en Chile, sino que además participó activamente en la despenalización del aborto -conseguida en diciembre de 2020- ante la delicada y preocupante situación, en particular entre los niños y las embarazadas. 

Ginés González García

Ginés González García se graduó como cirujano en la Universidad Nacional de Córdoba en 1967, y continuó su formación académica en salud pública en la Universidad de Buenos Aires y otras instituciones, logrando diversos diplomas y maestrías. Desde 1970, se desempeñó en el ámbito de la salud pública, trabajando como delegado sanitario en varias provincias del país y como director general del Sistema Nacional de Salud de San Luis hasta el golpe de Estado de 1976, que lo obligó a exiliarse temporalmente en España. A su regreso, trabajó en auditoría médica para obras sociales y, entre 1988 y 1991, fue ministro de Salud de la provincia de Buenos Aires.

Durante la gestión del gobierno de Antonio Cafiero, fundó la Fundación Isalud, donde se dedicó a desarrollar programas sanitarios. Gracias a sus logros, en 2002, González García fue nombrado ministro de Salud de la Nación por Eduardo Duhalde y, luego, ratificado en el cargo por Néstor Kirchner. Durante su gestión, implementó el Plan Remediar, cuyo objetivo era proveer medicamentos gratuitos a personas sin cobertura social en respuesta a la crisis económica de 2001. El plan se centró en fortalecer la atención primaria de salud mediante la distribución de botiquines en centros de salud de todo el país. 

Además, su ministerio promovió la educación sexual y el acceso a métodos anticonceptivos. De hecho, el propio González García apoyó abiertamente la despenalización del aborto. En este período, se redujo significativamente la tasa de mortalidad infantil en Argentina, alcanzando los índices más bajos en tres décadas. "Estoy contento. Es un enorme paso. No deja uno de sentirlo en el sentido afectivo pero no sólo estoy contento por el debate, que fue obviamente con los mismos argumentos, sino que fue mucho más tranquilo, fue un de mas democrático. Por la calle, que lo que vi yo, fue con otra madurez", había dicho el ex funcionario tras la legalización del aborto.

Impulsor de la ley para que la ESI llegara a las escuelas

Esto lo llevó a ser el centro de las críticas de la Iglesia por su plan basado en la Educación Sexual Integral (ESI) y la libre distribución de preservativos y anticonceptivos, sumado a sus declaraciones de apoyo a la despenalización del aborto. "Me parece que la evolución de la sociedad es permanente. Esto tiene ya muchos años. Todos vamos cambiando y así maduran y evolucionan las sociedades. No hay que tomarlo como ningún triunfo de un grupo o de otro sino que es una mejora colectiva que obviamente es optativa y va ser de acceso social y gratuito vamos eliminar las tragedias que acompañan esta circunstancia", señalaba Ginés.

Aquel conflicto con la Iglesia llegó a su máxima expresión cuando el gobierno de Cristina Kirchner propuso en 2007 distribuir en forma gratuita la píldora del día después en el sistema sanitario, como parte del Programa Nacional de Salud Sexual y Procreación Responsable que impulsaba el Ejecutivo. La serie de enfrentamientos terminaron con la salida de Ginés del Ministerio: en 2007 fue designado embajador en Chile, cargo que ocupó hasta 2015. Durante su mandato, fue ratificado por la presidenta Cristina Fernández de Kirchner en su segundo período. Al finalizar su gestión diplomática, se reincorporó al ámbito sanitario, donde siempre brilló.

La principal bronca de la Iglesia, que fue manifiesta en palabras del capellán y obispo Antonio Baseotto, se debía a que el ex ministro distribuyó una guía para la atención de abortos no punibles con el fin de evitar la judicialización de los casos previstos en la ley. "Me decían en el 2005 que era el ministro que desafiaba a Dios. Me lo decían por el aborto, por la educación sexual, por la distribución de anticonceptivos. No estoy de acuerdo con esto porque si no el problema que tiene el Vaticano es grande porque Italia hace esto, Francia hace esto, porque España hace esto, Irlanda hace esto y son países católicos. Los más católicos de Europa", había criticado Ginés.

Gran bastión médico y político para la despenalización del aborto en la Argentina.

Y sumó: "Si quiere poner en práctica esa doctrina, que se lo diga también a los países centrales. No puede ser que actúen así con ferocidad con América Latina. Esto en Europa no lo hacen. Yo respeto todas las creencias pero lo que no puede ser es que las creencias estén por encima de la evidencia". Para graficar la huella que dejó el ex ministro dentro de la salud argentina hay que agregar también que impulsó en medio de la crisis social de 2002 la conocida "Ley de Genéricos", que obligaba a prescribir los medicamentos en base a su nombre genérico y no su marca, lo que produjo un enfrentamiento con los principales laboratorios. 

Entre 2005 y 2013, lanzó el plan el SUMAR dio cobertura de salud a más de 18 millones de niñas, niños, adolescentes, embarazadas, y mujeres y hombres de hasta 64 años en todo el país, que carecían de cualquier obra social o seguro médico. Dio impulso a la Ley N.º 26.689 sobre el cuidado integral de la salud de las personas con enfermedades congénitas -acompañada por el lanzamiento del Programa Nacional de Enfermedades Poco Frecuentes y Anomalías Congénitas (EPFyAC)8 - y la Ley N.º 25.929 de Parto Humanizado, que buscaba anteponer el parto natural a las prácticas invasivas y garantizar el respeto a los derechos de las mujeres gestantes.

En diciembre de 2019, bajo la presidencia de Alberto Fernández, volvió a asumir el cargo de ministro de Salud y uno de sus primeros actos fue actualizar el protocolo de aborto no punible. A comienzos de 2020, la pandemia de COVID-19 llegó a Argentina, y González García estuvo al frente de la respuesta sanitaria, con medidas como el cierre de fronteras y la suspensión de clases. Sin embargo, su gestión se vio empañada por el escándalo del "Vacunatorio VIP" en febrero de 2021, cuando se reveló que había facilitado la vacunación a personas allegadas al gobierno del ahora ex presidente denunciado por "violencia de género". 

Garantizó el acceso universal a los anticonceptivos por primera vez en la Argentina

Esto llevó a su renuncia, solicitada por el propio Alberto, quien le soltó la mano y terminó opacando su intachable y hasta envidiable gestión. Sin ir más lejos, en septiembre de este año el ex ministro de Salud de la Nación había insistido en que eran falsas las acusaciones sobre irregularidades que se le imputaron en el caso del Vacunatorio VIP, declaró que el gobierno de Fernández "le soltó la mano" y advirtió que todo pudo haberse tratado de "una cama política" en su contra. "Estoy acusado de nueve vacunas que estaban autorizadas totalmente, que les correspondían porque eran mayores de 60 años. Algunos tenían otras causas, eran médicos, otros eran personal estratégico, diputados y senadores. Y todos además fueron vacunados cuando ya había en esa categoría más de 35 mil vacunados", había explicado meses atrás.

El médico había aseguró que si está atravesando un juicio por las nueva vacunaciones, "tendría que haber 35 mil juicios más". "No es que se me ocurrió a mí, estaban autorizados, se estaba haciendo en todo el país. Por lo cual es como un insólito, pero lo que sucedió es que se habló de vacunatorio VIP y todo el mundo sabe que nunca hubo un vacunatorio en el Ministerio, ni antes ni después", había remarcado con razón. La causa inició luego de que se conocieran los casos de entrega de vacunas a Horacio Verbitsky por -según el propio Ginés- "una emergencia porque al periodista que se fue a vacunar al Posadas y no lo quisieron vacunar por sus antecedentes políticos". "Un día que yo no estaba en Buenos Aires se pidió permiso al director del hospital para ir al ministerio a vacunar a los nueve y eso fue lo que se hizo", se justificó.

Sobre Verbitsky, sostuvo que "fue raro porque no le hice un favor a él, y aunque lo creyera, no puede decirlo por radio". El ex ministro sostuvo que el periodista dijo dos mentiras: "Primero dijo que era amigo mío y segundo que se vacunó por ser amigo mío. Las dos cosas son macanas. Se vacunó porque le correspondía, porque estábamos vacunando a todas las personas mayores de 70 años y el tenía 79″. "Eso fue también lo que me crucificó", aseguró el exministro, quien si bien sostuvo hasta sus últimos días que fue víctima de una "cama política", destacó que nunca lo denunció por falta de pruebas que lo demuestren. "No puedo decir que me hicieron una cama. Yo tenía enemigos, me había opuesto a algunas compras de vacunas que eran con intermediarios", había declarado.

Alberto Fernández entregó en bandeja de plata su cabeza.

Y concluyó sobre el abandono que sufrió de Alberto Fernández: "Quería que las compras se hicieran directo con empresas o con estados. Hubo gente interesada que se perjudicó con ello. No quería que hubiera ninguna empresa local, que sean los productores. Tuve una discusión por eso con el Presidente, se enojó conmigo, pero después me dio la razón. No sé por qué fue, yo quería defenderme y me dijeron 'ya mandamos a decir que te pedimos la renuncia'. Eso me condenó. Porque si el propio gobierno a quien es el comandante supremo de una pandemia lo defenestra de esa manera, sin permitirle que diga nada, obviamente quedé mal parado ante la gente".  Ginés González García sufría de cáncer, había decidido internarse en las últimas 48 horas por un cuadro de deshidratación y tristemente falleció este viernes.