14 Noviembre de 2023 14:43
Un hecho insólito fue evitado por la Dirección General de Aduanas (DGA). Es que un hombre decidió contrabandear 6.400 fósiles de dinosaurios con destino a Europa. La colección fue entregada a la provincia de Río Negro, de donde provienen dichas piezas. El acusado llamado Julián Corsolini había realizado diversos métodos para ocultar la colección paleontológica ya que decía que se mudaba a España. Pero fue descubierto y las piezas enviadas a la provincia.
Las autoridades provinciales fueron advertidos por denuncias de lso vecinos de Corsolini, que vieron los movimientos "extraños" en su hogar. Pero, cuando el operativo se llevó a cabo en el lugar, la colección ya había salido del país. Así fue que la AFIP, a través de la Aduana, emitió un alerta internacional para solicitar a su par de España que detenga e inspeccione los contenedores de Corsolini.
Cuando la Aduana de España envió especialistas al puerto de Valencia, descubrieron las piezas fósiles. Para poder cruzar la frontera, el acusado había escondido las piezas en dobles fondos y revestimientos de yeso u otros materiales para que no fueron descubiertos a simple vista. La exportación legal de piezas paleontológicas y arqueológicas requiere el aval del Museo Argentino de Ciencias Naturales Bernardino Rivadavia y el Instituto Nacional de Antropología y Pensamiento Latinoamericano (INAPL), respectivamente, establecidos como autoridades de aplicación por la Ley N° 25.743. Por eso, Corsolini cometió un delito.
Además no tenía certificaciones y transgredió los artículos610 y 954 del Código Aduanero, además de la Ley N° 19.943, de Bienes Culturales. Tras ser recuperados, las piezas fueron enviadas para que los cientfícos del CONICET del Museo Bernardino Rivadavia y el INAPL certificaran su autenticidad. Así se supo que tenían un incalculable valor histórico y que hasta tenían el fósil de la flor margarita más antiguo del mundo de 47 millones de años. Además había huevos de dinosaurio, el esqueleto completo de un hadrosaurio, un amonite de más de 20 centímetros de diámetro ty múltiples piezas de ámbar, de millones de años, con insectos preservados en su interior.
Durante la entrega de los bienes a la Provincia de Río Negro, realizado en el Museo Bernardino Rivadavia, Guillermo Michel, director general de Aduanas, dijo: "Estamos ante el mayor secuestro de bienes culturales de la historia argentina y es un orgullo poder devolver nuestro patrimonio a su lugar de origen. Agradezco enormemente la colaboración del Museo, el INAPL y la aduana española, que han sido determinantes en la recuperación de las piezas".
En tanto, Luis Cappozzo, director del Museo Argentino de Ciencias Naturales Bernardino Rivadavia, declaró: "El aporte, cuidado e investigación del equipo de científicos y científicas del Museo en la restitución de este material totalmente valioso. Es un ejemplo de la integración de los organismos involucrados, cada uno en cumplimiento de sus respectivas misiones, desde sus conocimientos y procedimientos".