El presidente Alberto Fernández promulgó este martes la modificación a la ley del Impuesto a las Ganancias, sancionada a principios de mes por el Congreso, por la que se eleva a $150.000 brutos mensuales el nuevo mínimo no imposible.
En ese mismo acto, el primer mandatario también lanzó una nueva línea de créditos para la refacción y construcción de viviendas en todo el país.
Junto a intendentes y gobernadores, en primera instancia Fernández firmó el decreto de promulgación durante un acto en la Casa de Gobierno.
Allí, mencionó que la iniciativa estuvo a cargo del presidente de la Cámara de Diputados, Sergio Massa, y que después fue rápidamente aprobada por los senadores.
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La promulgación era un paso fundamental para que trabajadores en relación de dependencia y jubilados con ingresos menores a ese monto dejen de estar alcanzados por el tributo y reciban las devoluciones por las retenciones efectuadas durante el primer trimestre en concepto de Ganancias.Según dijo Fernández, las modificaciones buscan “recomponer el poder adquisitivo de más del 90% de las personas asalariadas y también de jubilados".
"Estamos resolviendo el poder adquisitivo de un millón de trabajadores aplicados a este impuesto a las ganancias, lo que representa un beneficio para el más del 90% de las personas asalariadas", agregó.
Luego de la firma, el presidente también anunció el lanazamiento de los créditos Casa Propia, los cuales están destinados para la refacción y construcción de viviendas en todo el país. En base a lo que explicó, se trata de 87.000 créditos a taza cero, aplicados con la fórmula Hogar, que se ajusta al salario.
"Hoy es un día importante porque estamos poniendo orden en algo que afectaba a un montón de gente que dependía de un solo salario. Sabemos que tenemos que ayudar a los que están alquilando y a los que sacaron créditos y no pueden pagarlo", añadió.
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Además, comentó que la idea estuvo a cargo de del ministro de Desarrollo Territorial y Hábitat, Jorge Ferraresi, y que junto a su equipo, trabajaron para lanzar estos créditos."Frente a los que niegan la verdad, asumamos que hay una verdad que nos corre, nos castiga y nos contagia. Tenemos que ser muy cuidadosos para sufrir lo menos posible en este tiempo tan trágico que nos toca vivir", cerró el presidente, en referencia a la puja que existe con la Ciudad de Buenos Aires por la suspensión de clases presenciales.