12 Abril de 2018 16:46
Un fiscal de la Corte Suprema de Justicia dictaminó que la revista satírica Barcelona se encuentra amparada por el derecho a la libertad de expresión, por lo que no tiene lugar la condena indemnizatoria que se le impartió tras una denuncia de la ultraderechista Cecilia Pando en 2010.
La contratapa de Barcelona que enojó a Pando.
Hace ocho años la revista publicó una contratapa en la cual se podía ver un fotomontaje de la dirigente desnuda y atada, en la cual se satirizaba una protesta en la que Pando se había encadenado al edificio Libertador en reclamo por la detención de militares procesados.
La mujer denunció que su imagen se vio afectada por esa contratapa y acusó a la revista de "daño moral". Hoy el procurador fiscal Víctor Abramovich, dictaminó que el medio gráfico se encuentra amparado por el derecho a la libertad de expresión y que no excede el alcance de una opinión sobre un asunto de interés público.
Pese a que la Corte Suprema aún se tiene que expedir, este es un revés para Pando que en dos instancias había logrado una condena indemnizatoria por $ 70.000 que debía pagar la revista, por los daños y perjuicios provocados por la difusión del fotomontaje.
Tras ese dictamen Barcelona interpuso un recurso extraordinario ante la Corte Suprema el cual recién hoy tuvo el dictamen de Abramovich, que caracterizó al evento que motivó la publicación como un asunto de interés público, al igual que el debate y los cuestionamientos que aquellos suscitan.
Como si fuera poco el fiscal sostuvo que el margen de tolerancia de la actora frente a la crítica periodística debe ser mayor debido a su carácter de figura pública.
"La sátira social o política se encuentra tutelada por la libertad de expresión y es una poderosa herramienta de comunicación de ideas y opiniones sobre asuntos públicos, merecedora de protección constitucional", sostuvo Abramovich.
Además en lo referente al fotomomtaje, el representante del Ministerio Público Fiscal indicó que se buscó construir la sátira a través del absurdo, dando una connotación sexual a la modalidad de protesta de la agrupación encabezada por la actora.
Con respecto a la Revista Barcelona y su audiencia sostuvo que ningún lector de ese medio podía razonablemente considerar que lo que se transmitía era información verdadera o creíble acerca de Pando, su vida íntima o su imagen.